Esta es la propuesta que lanza la recién nacida Alianza Europea para una Recuperación Verde. A través de un manifiesto difundido este martes, firmado por 180 responsables políticos, directivos de grandes multinacionales, sindicatos, ONG y expertos, se pide a la Comisión Europea que utilice el Pacto Verde ―que estaba en fase de desarrollo cuando estalló la pandemia― para salir de esta crisis económica, que será “más fuerte que la crisis de 2008”.
Esta alianza se alinea así con la carta que 13 ministros de Medio Ambiente y Clima de la UE enviaron la semana pasada a Bruselas reclamando también que no se deje atrás por el coronavirus ese Pacto Verde, que estaba llamado a ser la hoja de ruta de Europa para luchar contra el cambio climático y para lograr que la economía comunitaria se desenganche de los combustibles fósiles. Pero, ante la magnitud de la crisis sanitaria y económica que ha supuesto la pandemia, han surgido voces dentro de la UE, principalmente de países del Este, aunque también de algunos sectores económicos, que ponen en duda la continuidad de algunas medidas y políticas climáticas. La carta de la semana pasada y el manifiesto de la alianza que se lanza este martes están firmados por ministros de Alemania, Francia, Italia, Suecia, Luxemburgo, Portugal, Austria, Finlandia y España. La vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera, ha sido la encargada de rubricar el escrito en representación del Gobierno español.
Pero la alianza presentada ahora, que ha sido promovida por el diputado en el Parlamento Europeo de Los Verdes Pascal Canfin, va más allá. Porque incluye también a 79 eurodiputados de 17 países de la UE, 37 directores generales de multinacionales y grandes empresas, 28 asociaciones empresariales, confederaciones y federaciones sindicales y siete ONG, además de varios grupos de expertos. Comparten firma los máximos directivos de grandes compañías como L’Oreal, Volvo, Danone, Ikea, Enel o Iberdrola con los representantes de ONG medioambientales como WWF, Birdlife o la Red de Acción Climática (conocida por sus siglas en inglés CAN).
Los firmantes dejan claro que la lucha contra la pandemia es la “principal prioridad” y debe hacerse todo lo que se necesite para detener y erradicar el virus. Pero, mirando a las consecuencias económicas que tendrá la Covid-19, explican que Europa debe dar “una respuesta económica coordinada fuerte” para superar un golpe más duro que el que supuso la crisis de 2008. La vía para dar esa respuesta, entienden, es realizar “inversiones masivas” que deberán “desencadenar un nuevo modelo económico europeo” que gire alrededor de los “principios ecológicos”. En su opinión, la transición necesaria para limpiar la economía europea de gases de efecto invernadero, unida a la protección de la biodiversidad y la transformación del sector agroalimentario, pueden generar “rápidamente empleos, crecimiento y mejorar el estilo de vida de todos los ciudadanos”.
Esta alianza recuerda que la transformación hacia una economía verde no es un camino que tenga que partir de cero ahora, porque en la última década se ha producido importantes avances: “Hace 10 años, los vehículos de cero emisiones eran solo un prototipo”. “La energía eólica era tres veces más cara de lo que es hoy y la energía solar siete veces más”, añaden.
Los firmantes se comprometen a trabajar juntos, “compartir conocimientos, intercambiar experiencia y crear sinergias” para poner en marcha las inversiones de “recuperación verde” que se necesiten. Y respaldan explícitamente el Pacto Verde de la Comisión por tener un “enorme potencial para reconstruir” la economía europea.
Fuente: Tynmagazine