Más allá de la cuestión geopolítica que se viene dirimiendo a nivel global entre EE.UU. y China (con probables derivaciones aquí luego del 27/10), el productor argentino debe comprender que estamos frente a una campaña en la cual se impone la instrumentación de "ingenierías comerciales". ¡Más que nunca!
Muchos no coincidieron con nuestra optimista visión para las cotizaciones en Chicago hace más de un mes en Mercosoja. Pero era casi cantado. No hay antecedentes de una demora semejante en la siembra en Estados Unidos y los estadounidenses sin estadísticas están "perdidos".
Hoy, los precios han mejorado y el panorama justifica aquel optimismo. El
USDA tuvo que recortar stocks en EE.UU. (mayor consumo por precios bajos,
obvio), al tiempo que también modificó el área sembrada y los rindes de cosecha
gruesa (también previsible). Además, veremos nuevos ajustes a medida que
avancemos en el calendario y el USDA vaya sincerando sus reportes.
Si las reservas de maíz y soja se aproximaran a un nivel cercano o del orden del 10% del consumo interno en EE.UU. se prenderán "todas las luces del tablero" y las cotizaciones se entonarán aún más. Una historia que ya vimos en 1996, 2004, 2009 y en 2012/2013. En esos años Chicago tuvo que acudir a altos precios (fugaces pero inevitables), que podríamos bautizar como "picos de racionamiento". Vamos camino a ello en algún momento del segundo trimestre del año próximo, cuando el indicador mencionado accione y coincida con el habitual mercado climático de cada temporada. De manual.
Así las cosas, aquí se impone el diseño de estrategias de ingeniería comerciales casi "quirúrgicas" en lo que al manejo de los tiempos se refiere. Ante un año de cambios en las políticas hacia el sector (gane quien gane el 27/10), el dilema no es ni debiera ser: ¿vendo forward o no? Es un poco más complejo.
Nuestro consejo es efectivizar combinaciones múltiples que contemplen el compromiso de entrega física que se asume. Tener en cuenta que las ventas forward implican un compromiso de entrega de mercadería, que las ventas por el Matba Rofex no, pues pueden arbitrarse. Que los puts (opción de venta) son un "seguro de precios" que no conlleva obligación de entrega. Que, este año, los calls (opción de compra) deben acompañar una venta a futuro (forward o por Matba Rofex).
La receta para esta campaña sería diseñar coberturas por el 100% de la producción esperada y el "combo" sugerido es: 1) puts en plaza local; 2) calls en Chicago; 3) ¡"colgarse de Chicago"! con basis mientras existan. ¿Timing? Combinaciones en Chicago, ya. Ventas forward, antes del 27/10..