CLIMA y SUELOS
La semana se caracterizó por la alternancia entre condiciones ambientales muy
húmedas, con eventos climáticos de variadas intensidades, según zonas, como
precipitaciones, descargas eléctricas, lloviznas, nieblas, neblinas, ráfagas de
vientos de importancia con ciertos daños de estructuras e infraestructuras en
centros urbanos, porcentajes de humedad ambiente elevados, temperaturas medias
diarias superiores para la época, días soleados con temperaturas bajas y
manifestaciones de las primeras heladas.
En toda el área de estudio, los milímetros de agua caída acumulados,
fluctuaron entre 01 a 15 milímetros, siendo muy irregular su distribución
geográfica, al igual que las temperaturas, con valores que llegaron a 1 ºC y
posteriormente ascendieron a registros de 28,5 ºC.
Tal situación, condicionó en diferente proporción todas las actividades, pero
permitió que se reanudaran los movimientos en el proceso de cosecha de soja de
segunda, algodón, sorgo granífero y maíz de segunda.
Y por otro lado, la siembra de trigo, retomó su ritmo con dificultades, pero
siguió sumando superficie sembrada para la campaña.
Las condiciones climáticas, fluctuaciones y amplitudes térmicas, bajo un
período húmedo, mantuvieron la inquietud del sector productivo, que esperó
ambientes secos, fríos, estables para el logro de las tareas pendientes
(cosechas – aplicaciones – siembras) pero, consolidando y afirmando las
planificaciones y estrategias elegidas, para cada situación en particular.
TRIGO
Las condiciones ambientales no fueron favorables para un proceso de siembra,
pero éste continuó a ritmo sostenido y con todo el empuje que el sector
productivo le fue inyectando desde un comienzo.
Pero dicha situación no amedentró al mismo y siguió incorporando superficie
sembrada del cultivo.
La intención de siembra para el centro – norte santafesino se estimó en unas
375.000 ha, con un incremento del orden del 4,5 a 5 % sobre el área sembrada en
el período anterior.
En la semana, en distintas áreas de los distintos departamentos se reanudó el
proceso de siembra, con algunas dificultades por los altos porcentajes de
humedad que complicaron el normal funcionamiento de las sembradoras, en la
aplicación de fertilizantes (deslizamiento) o el apelmazamiento de suelos.
Pero dichas situaciones no impidieron que se logrará hasta la fecha un
progreso de avance del orden del 70 %, sobre la intención, lo que representaría
unas 262.500 ha.
La germinación se desarrolló sin problemas, evidenciando un muy buen poder
germinativo de los materiales utilizados y la tecnología aplicada, dice el
informe que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
SOJA TARDIA
Lentamente retornó el movimiento los equipos y cosechadoras, por lo cual el
proceso de cosecha avanzó, llegando hasta la fecha a un 78 %, representando
aproximadamente unas 391.950 ha, con una variación intersemanal de 3 puntos y un
retraso de 12 puntos, en comparación a la campaña pasada, para el mismo período.
Se observa la pérdida de calidad y cantidad, como consecuencia del deterioro
sufrido por las condiciones ambientales ocurridas durante todo el período,
superior a treinta días, con realidades muy complejas y la disyuntiva de la
trilla o el abandono de la parcela, ya que la recolección estuvo y estaría
condicionada por costos y valor del qq.
Hasta la fecha los rendimientos promedios en el Sur del área de estudio
fluctuaron entre 28 – 30 qq/ha mínimos y máximos de 40 – 44 qq/ha, con lotes
puntuales de 48 qq/ha, con finalización del proceso de cosecha.
Para el Centro del área de estudio los rendimientos mínimos fluctuaron entre
14 – 16 – 20 qq/ha, los máximos entre 38 – 40 – 42 qq/ha, con lotes puntuales de
45 qq/ha, con un 95 % de cosecha. Para el Norte del área de estudio los
rendimientos mínimos fluctuaron entre 8 – 12 – 15 qq/ha, los máximos entre 24 –
26 – 28 qq/ha, con lotes puntuales de 32 qq/ha, con un 90 % de cosecha.
MAÍZ TOTAL (campaña 2018/2019)
La superficie sembrada fue de 184.500 hectáreas.
Unas 89.000 ha correspondieron a los lotes sembrados en primera instancia, denominado maíz de primera, el cual de acuerdo al área de estudio tendría dos usos, un porcentaje a grano para futura venta comercial y el otro porcentaje como forraje, para consumo animal bovino.
Otras 95.500 ha correspondieron a las parcelas sembradas en segunda
instancia, denominado maíz de segunda o tardío.
Maíz temprano (de primera)
Campaña 2018/2019, la superficie sembrada fue de 89.000 ha; la superficie
cosechada (grano comercial) de 66.700 ha, con un rendimiento promedio de 95,0 qq/ha
y una producción de 633.650 toneladas.
Maíz tardío (de segunda)
En la semana, bajo ciertas condiciones ambientales más favorables y con
características húmedas, altos porcentajes de humedad ambiente y de grano, según
área, se reanudó lentamente el proceso de cosecha.
Éste fue calmando las ansias del productor, que cosechó sin esperar mejores condiciones del cereal, pero así, sumó costos por gastos adicionales de secado.
En los departamentos del Sur, el rendimiento promedio fluctuó entre 80 a 105 qq/ha, con lotes puntuales de 115 qq/ha.
En los departamentos del Centro, el rendimiento promedio fluctuó entre 65 a 85 qq/ha, con lotes puntuales de 100 qq/ha.
En los departamentos del Norte, el rendimiento promedio fluctuó entre 40 a 60 qq/ha, con lotes puntuales de 75 qq/ha.
Los cultivares con destino a grano comercial, continuaron su avance a fin de
su ciclo, sin inconvenientes y con un estado sanitario de bueno a muy bueno.
ALGODÓN
El proceso de cosecha se reanudó, después de varios días en que estuvo detenido.
En la zona Este algodonera, el avance de la recolección fue hasta la fecha
del 88 %, con un incremento intersemanal de 18 puntos.
Se remarca que, con el transcurso del tiempo, debido a las situaciones climáticas que se estuvieron describiendo en todos estos últimos 30 días, los estados de los cultivos fueron evidenciando síntomas tales como: el rebrote del cultivo, caída de fibra y pudrición de bochas.
Como consecuencia de ello, la pérdida de calidad, de rendimiento y aumento de los costos por defoliaciones reiteradas, en los lotes rebrotados, reflejaron y reflejarían una disminución en el rendimiento promedio y producción final.
Los cuales fueron variando en valores mínimos de 10-14 qq/ha a máximos de
24-28 qq/ha.
Se observa en los valores obtenidos el impacto y grado de afectación por las
excesivas precipitaciones, así como también en lotes sembrados tardíamente.
También sería fundamental y obligatorio la destrucción de los rastrojos de
algodón, que evitaría la reproducción del picudo.
En el área algodonera Oeste, sin cambios, totalmente paralizado el proceso de cosecha. De acuerdo al estado de situación y el avance de los tiempos la realización de actividades específicas, como defoliantes, control de picudo, control de malezas, ya no se efectuarían y con ello se abandonarían los lotes con pérdida del cultivo y ciclo.
SORGO GRANIFERO
Las actividades de cosecha se reanudaron, alcanzando hasta la fecha el 80 %
de avance, mostrando un retraso de 10 puntos porcentuales con respecto a la
campaña pasada, en similar período.
En general, a pesar de los diferentes escenarios mencionados en todo este último
tiempo, el cultivo se mantuvo en buen estado y fue el que durante todo el
período húmedo, el que menos consecuencias evidenció y sostuvo sus buenas
condiciones, no mostrando oscilaciones y ni pérdidas en los rindes.
Los rendimientos promedios oscilaron entre 45 – 48 – 50 qq/ha, con minímos de 30
– 32 qq/ha y máximos de 54 – 56 qq/ha, sin variación con los enunciados en un
comienzo de la cosecha