La Secretaría de Gobierno de Agroindustria, a través de la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario, tras la capacitación realizada al personal de Rentas comenzó los operativos de control de manera conjunta con la AFIP. En tal sentido, se clausuró en la localidad de Salvador Mazza, provincia de Salta, un molino que operaba sin matrícula de Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (RUCA) y sin haber colocado el Controlador Electrónico de Molienda de Trigo (CEMT).
La medida incluyó la interdicción de la totalidad de la harina y otros subproductos hallados en depósito, también el precintado del banco de primera rotura donde se inicia el proceso de molienda.
Tras un análisis exhaustivo de la documentación comercial que aportó la firma, los tres organismos intervinientes pudieron constatar que la firma incurría en gravísimas faltas comerciales y tributarias.
La empresa, que como actividad principal tiene la exportación de trigo, acreditó ventas al exterior que representan el doble de la mercadería adquirida con ese destino. El hecho podría explicarse en la anulación de Cartas de Porte por más de 2.000 toneladas de trigo que tenían como destino la firma y que tras su anulación no se registraban en los libros oficiales. A partir de ello, se pudo verificar también la existencia de Cartas de Porte duplicadas y con el número de Código de trazabilidad de granos CTG adulterados, y por lo tanto sin ingreso en los libros oficiales.
Por otra parte los organismos de aplicación tributaria dejaron trascender aunque no confirmaron cifras por secreto fiscal, que era millonaria la suma implicada en operaciones de exportación no bancarizadas.