La Secretaría de Gobierno de Agroindustria, a través de la subsecretaría de Agricultura, elaboró un trabajo sobre "Mapas de riesgo de déficit y excesos hídricos en los cultivos según escenarios de cambio climático", que proporciona información muy valiosa para el diseño de medidas de adaptación a la variabilidad climática, tanto a nivel intra finca como en el diseño de políticas públicas.
Las principales características y beneficios de la herramienta fueron presentados el día de hoy por los secretarios de Gobierno de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere y de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman en la sede de Agroindustria frente a los actores del sector.
Ante esto, Etchevehere indicó que "el cambio climático es una realidad, ante lo que contamos con acciones de mitigación y adaptación. Este tipo de análisis permite prever el impacto de políticas públicas tanto a nivel del país como a nivel regional. Es fundamental fortalecer los sistemas de información para que el productor pueda mejorar la gestión de los riesgos climáticos y que las empresas anticipen desarrollen instrumentos tecnológicos más útiles ante los nuevos escenarios".
En tanto el Secretario Bergman destacó que "Hay una primera prioridad que es el desarrollo económico de nuestro país", pero recordó que "no puede ser a expensas de dañar el ambiente ni la salud de la gente por lo que necesitamos validar las buenas prácticas". En tal sentido, señaló la necesidad de que "haya una ley de cambio climático, para que el Gabinete Nacional de Cambio Climático sea una política de Estado que nos supere a nosotros en esta administración".
Al respecto, el subsecretario de Agricultura, Luis Urriza, explicó que "a partir de esta herramienta, se podrán llevar a cabo políticas orientadas a la intensificación de las rotaciones y al empleo de cultivos de cobertura y de servicios, teniendo en cuenta los períodos de exceso de agua que son esperables en la pampa húmeda".
La Oficina de Riesgo Agropecuario, dependiente de la subsecretaría de Agricultura, monitorea desde hace varios años las reservas de agua en el suelo, mediante un modelo de balance hídrico (que incluye características de los suelos, las diferentes fechas de siembra de los cultivos y los requerimientos en cada fase productiva), con el cual se realizaron mapas de riesgo de déficit y excesos hídricos, que afectan a los principales cultivos (maíz, soja, trigo, girasol y algodón).
Estos mapas permiten comparar niveles de riesgo en relación a la disponibilidad de agua para los cultivos de secano para el período 1980/2010 con los previstos para el futuro cercano (2015/2039), según dos escenarios de cambio climático, uno de emisiones moderadas de gases de efecto invernadero (RCP 4.5) y otro más extremo (RCP 8.5), con la tendencia actual de emisiones.
El análisis de los cambios en el riesgo de cada cultivo permite establecer políticas de planificación territorial tendientes a aprovechar nuevas áreas con disminución de riesgos previstas e identificar otras prioritarias para promover técnicas de manejo de cultivos o variedades adaptadas a las condiciones futuras en aquellas donde el riesgo se prevé en aumento.
Sin embargo, los estudios sobre el clima en el futuro desarrollados en Argentina y publicados en la Tercera Comunicación Nacional a la Convención Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, prevén modificaciones importantes tanto en la cantidad y distribución anual de la lluvia, como en las temperaturas en vastas zonas productivas del país.
Es por esa razón que Agroindustria amplió el análisis de mapas de Riesgo de Déficit y Excesos hídricos para cultivos de secano, teniendo en cuentas distintos escenarios de cambio climático.