El maíz terminó cerrando con un leve incremento, mientras que la soja registró pérdidas superiores al 1%. El factor de mayor peso en los precios internacionales estuvo dado por presión de cosecha en Estados Unidos en un año en el que se estima una producción récord.
A mediados del mes de octubre se registraron importantes precipitaciones en
el Midwest norteamericano que obligaron a frenar las tareas de cosecha en este
país. Esto generó un retraso en la trilla y puso en riesgo el estado de los
cultivos, particularmente el de la soja. En este sentido, el USDA informó que al
21 de octubre se llevaba cosechado la mitad del área sembrada con soja, con un
retraso de unos 15 puntos porcentuales respecto al promedio histórico. El clima
más seco observado en la última semana habría permitido avanzar con más ritmo
para así recortar el retraso que venía experimentando.
El otro factor que sigue repercutiendo en los precios de la oleaginosa, tal vez
el principal, es la pobre demanda internacional por la mercadería de origen
norteamericano debido a la ausencia de China en el mercado. La guerra comercial
que protagonizan las dos potencias económicas mundiales sigue sin mostrar
avances. China, el principal importador de soja a nivel mundial, dejó de
adquirir soja estadounidense en medio de una puja comercial con la imposición de
aranceles de por medio. De hecho, este país viene realizando cancelaciones de
compras previamente realizadas a EE.UU. Al momento hay solamente 800.000 tt de
soja comprometida para embarcar a China, aunque se desconoce si será efectiva su
realización. A misma fecha la campaña pasada, los compromisos de embarque
superaban los 8 millones de toneladas.
Al no comprarle soja a EE.UU., China redireccionó sus compras al mercado
sudamericano, con Brasil como principal proveedor. Argentina que experimentó una
fuerte seca este año con una consecuente caída en la producción también está
exportando algo de poroto de soja al gigante asiático. Durante septiembre y lo
que va de octubre se observaron exportaciones de poroto de soja hacia China
debido a las elevadas primas de exportación. Esta situación nos lleva a repensar
cuál será el rol de Argentina (y Sudamérica) como exportador de subproductos y
de poroto de soja para la próxima campaña ¿Argentina tendrá un rol más relevante
como exportador de poroto en detrimento de los subproductos? Analistas privados
dan cuenta de la posibilidad de que si no se soluciona el conflicto entre China
y EE.UU., nuestro país termine exportando unas 15 millones de toneladas de
poroto de soja, el doble de lo observado en campañas anteriores.
El maíz, al igual que la soja, viene mostrando caída en su precio presionado por
el avance de cosecha en Estados Unidos que al momento se encuentra en un 50%. A
diferencia de lo que sucede con la soja, la cosecha de maíz muestra avances
superiores a los observados en otros años. Se espera una cosecha récord a causa
del incremento en la superficie sembrada y los altos rindes registrados, aunque
con una demanda más dinámica. Ante esta situación, los fondos especulativos
recortaron fuertemente suposición neta vendida en futuros de maíz pasando de
estar vendidos en alrededor de 15 mill.tt. a fines de septiembre a sólo unas 3
mill.tt. a mediados de octubre. A diferencia de lo que sucede con la soja, la
demanda internacional se muestra muy activa y se observa mayor facilidad para la
colocación de mercadería ya que el conflicto con China no gravita en este
mercado.
Por último, en lo que respecta al mercado local, comenzó la cosecha de trigo en
lotes tempranos ubicados en el norte del país lo que estaría permitiendo el
empalme de la campaña vieja con la nueva con la caída correspondiente en los
precios disponibles. Con relación a la producción, debido a que los cultivos
sufrieron deficiencias hídricas durante su ciclo en diversas partes del país,
incluso heladas y caída de granizo, las estimaciones fueron recortadas a niveles
en torno a las 19 millones de toneladas. Hay que señalar que con la entrada de
la cosecha, además del empalme de precios, comenzarán a observarse
complicaciones logísticas para la descarga. Esto se podría dar como consecuencia
de la importante posición comprada de la exportación para noviembre y diciembre
en comparación con otros años. De acuerdo con la información recolectada en el
Siogranos en esta campaña hay unas 3 mill.tt. de trigo comprado para recibirse
hasta fin de año cuando en las campañas pasadas este número ascendía a sólo 2
mill.tt.
Por Equipo de Análisis de Mercados de FyO
Fuente: Centro de Gestión Agropecuaria