Luego de un fin de semana de fuertes tormentas en varias zonas productivas, los ingresos en el Mercado de Liniers comenzaron a acomodarse en volúmenes habituales. Las 8.599 cabezas que arribaron este miércoles fueron más que suficientes para una demanda bien abastecida que encuentra, aún en estos primeros días del mes, complicaciones de todo tipo. Las dificultades comerciales en los mostradores arrastran poca fluidez al negocio en el mercado.
Así, el Mercado perdió lo que había recuperado el martes. Más allá de algunos lotes destacados de novillo pesado y algo de vaca, la plaza mostró leves quebrantos que retornaron los valores a los establecidos el último viernes.
Para hoy jueves se espera una oferta que rondaría las mil cabezas, por los remates especiales del primer jueves del mes.