Conclusión N°1: Los precios nominales de trigo en 10 años registrarían un moderado aumento del 11% respecto de los valores actuales. Esto equivale a un incremento promedio anual de 1,1%, que estaría por debajo de la tasa de inflación estadounidense que se ubica actualmente en el 2,9% anual (Índice de precios al consumidor). De esta forma se desprende de las proyecciones de la OCDE-FAO que los precios caerían en términos reales en un 13% para el año 2027.
La baja de precios en términos reales prevista para el trigo en 10 años no es una buena noticia para los países productores de trigo, entre ellos Argentina. Según la OCDE-FAO el precio nominal de exportación trigo se habría ubicado en promedio en el período 2015/2017 en 206,6 U$S/tn. De acuerdo a sus proyecciones, este precio nominal llegaría en el 2027 a 229,1 U$S/tn, con un incremento del 11% en 10 años.
Pero al analizar las estimaciones del Organismo para los precios reales, vemos que en el período 2015/2017 el trigo se ubicaba en 187 U$S/tn, en tanto que se espera que en el 2027 sea de 163 U$S/tn, lo que implica una baja del 13% en 10 años. Lamentablemente, los precios nominales del cereal subirán pero por debajo de la inflación internacional, según estas proyecciones.
Conclusión N°2: En 10 años, para el 2027, crecería la producción mundial de trigo, siendo Argentina el país con el mayor incremento productivo –en términos relativos- en los próximos 10 años.
Según lo proyectado por este organismo y expuesto en el cuadro N°2, la producción mundial de trigo crecería un 11% en 10 años pasando de 750 Mt (Millones de toneladas) a 832,6 Mt. Esta situación se daría principalmente por un aumento de la productividad unitaria del 9% (de la mano de los avances tecnológicos) y en menor medida del aumento del área (4%).
Se destaca la proyección del crecimiento productivo para Argentina. En los próximos 10 años la producción triguera de nuestro país crecería un 19%, superando a la tasa de crecimiento de otros países productores por excelencia como los pertenecientes a la Unión Europea (8%), Rusia (14%) y Ucrania (17%).
Es menester mencionar que la Bolsa de Comercio de Rosario proyecta para la próxima campaña 2018/19 20 millones de toneladas de trigo, cifra que supera incluso la producción estimada por la OCDE-FAO a 10 años y marcaría un récord productivo absoluto. Este crecimiento en las proyecciones de trigo en Argentina se sostiene en base a un crecimiento del área de siembra a 6,18 millones de hectáreas y un rendimiento nacional que se estima por encima del promedio histórico debido a la tecnología aplicada y las buenas condiciones meteorológicas reinantes. Esperemos que este escenario finalmente se concrete a fin de año.
Si Argentina llega a ser el país de mayor tasa de crecimiento productiva de trigo en los próximos 10 años será principalmente por las políticas y acciones implementadas en los últimos años: la eliminación de derechos de exportación y restricciones a las exportaciones, tipo de cambio competitivo, la fuerza arrolladora de sus productores que apuestan a sembrar mayores extensiones, el paquete tecnológico aplicado al cultivo y las inversiones en activos fijos de los hombres de campo.
Conclusión N°3: Para el 2027 Egipto seguiría siendo el principal comprador de trigo del mundo con 15,2 Mt incrementando en un 29% su volumen de compra.
En materia de importaciones de trigo. El comercio internacional pasaría de 168,4 Mt actuales (promedio anual 2015/2017) a 193,2 Mt en el 2027. El incremento sería de 15% en 10 años. Egipto seguiría siendo el principal comprador de trigo del mundo con 15,2 Mt incrementando en un 29% su volumen de compra.
Brasil seguiría siendo el principal comprador de trigo argentino y proyecta un crecimiento de sus importaciones del 20% pasando de 6,9 Mt a 8,3 Mt. Según las estadísticas del SENASA, Argentina le exportó a Brasil en el año 2017 5,23 millones de toneladas de trigo y 365.830 kg de harina de trigo. En tanto, el USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos) estima que Argentina le exportará a su país vecino 7,5 millones de toneladas para la próxima campaña 2018/19.
El fuerte crecimiento previsto para las importaciones mundiales según la OCDE-FAO (y para países específicos como Egipto, Indonesia y Brasil) es un buen dato para naciones como la nuestra que cuentan con interesantes tonelajes para exportación.
Conclusión N°4: Rusia seguiría liderando como principal exportador de trigo del mundo marcando un incremento del 28% en la próxima década. Argentina le empata a la Unión Europea con un 17% de incremento del volumen exportable en el periodo analizado.
Rusia se destaca con incremento del 28% en su saldo exportable, pasando de 31,3 Mt a 40,2 Mt en la próxima década.
Argentina, por su parte, se posicionaría en el mercado internacional con un incremento del 17% en su saldo exportable pasando de 10,2 a 12,4 millones de toneladas de trigo en 10 años. Este incremento porcentual es igual al que mostraría la Unión Europea, pero si lo analizamos en términos de volumen, la Unión Europea incrementa sus exportaciones en casi 9 millones de toneladas mientras en Argentina 2 Mt aproximadamente.
El de menor crecimiento sería Estados Unidos, quien exportó en el período 2015/2017 un promedio anual de 25,2 Mt de trigo y en el 2027 podría comercializar 26,69 Mt. Apenas 1,2 millones de toneladas más (incremento de solo el 5%).
Conclusión N°5: El consumo mundial de trigo crecería en 97,2 millones de toneladas en la próxima década para posicionarse en un total de 823,8 Mt. China se posiciona con el mayor aumento en volumen consumido (+ 22,6 Mt), mientras que en términos porcentuales Pakistán se ubica primero con un 25% de aumento en los próximos 10 años.
El crecimiento mundial del consumo de trigo sería del 13% en la próxima década. Este valor se sostiene principalmente por el fortalecimiento del consumo animal cuyo crecimiento es del 20%. En tanto, el consumo humano de trigo se incrementaría un 10%. Entre ambos rubros y sumando el biocombustible y otros usos, se construye un consumo total de 823,2 Mt a nivel global.
China seguiría consumiendo fuertemente al trigo y absorbería 137,8 millones de toneladas para el año 2027. Esto indica que el incremento en volumen consumido sería de 22,6 millones de toneladas más respecto a este año. Pakistán por su parte, aumenta su participación del consumo de trigo en un 25% para los próximos 10 años. Por el contrario, la Unión Europea se mantendría relativamente estable con una variación del 5% para ubicarse en 134,5 millones de toneladas de trigo consumido.
Por último, en lo que respecta al principal comprador de Argentina, Brasil en 10 años pasaría de consumir 11,5 Mt a 13,1 Mt, es decir, incrementaría su consumo en un 14%. En este sentido, Argentina apunta a satisfacer el mercado internacional promovido por un importante aumento de su producción.