La siembra de trigo finalizó en las regiones del centro del país y orilla las 6 millones de hectáreas, una superficie que vuelve a poner al cereal de invierno en niveles de área récord, alentado por las buenas condiciones y perspectivas climáticas, como también por la ausencia de retenciones y precios entonados.
Según el Panorama Agrícola Semanal (PAS) de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el avance nacional alcanzó el 97,3 % de las 6.100.000 hectáreas estimadas, manteniendo un adelanto interanual de 2 puntos porcentuales. En números absolutos, arrancó el mes de agosto con un área incorporada que superó las 5,93 millones de hectáreas. Y las labores de siembra en todo el territorio nacional podrían finalizar en el transcurso de los próximos días y la campaña en curso terminaría ofreciendo un área 7 % superior al ciclo previo.
Durante la última semana, la siembra de trigo se desarrolló principalmente sobre las provincias de Buenos Aires y La Pampa, donde se concentra la totalidad del área que aún resta por implantar.
En el Centro-Este de Entre Ríos la siembra se dio por finalizada, alcanzando un área total de 280.000 hectáreas. Las buenas condiciones de humedad que se registraron durante gran parte de la ventana óptima de siembra permitieron relevar una expansión interanual del 7,7 %.
A su vez, sobre las regiones del Núcleo Norte y Sur, el cereal mantiene una condición de cultivo buena y el estado fenológico varía entre macollaje y encañazón.
Situación similar se relevó en el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires, donde la siembra habría alcanzado el 96 % de la superficie apta y los lotes mantienen un nivel de humedad entre adecuado y óptimo.
Sobre los núcleos trigueros del sur de Buenos Aires y La Pampa el cereal se encuentra entre emergencia y diferenciación foliar, bajo una presión sanitaria baja. El avance de siembra se ubicó entre el 88 % y 92 %, restando la implantación de 100.000 hectáreas.
