El agudo conflicto entre EE.UU. y China ya está en pie de guerra. Emprendida por el presidente Donald Trump, la política proteccionista se implanta no sólo en su país sino que, como represalia, se instala en China.
La llegada de Trump al poder ha acelerado los nacionalismos y las políticas proteccionistas en el mundo entero.
La guerra comercial entre EE.UU. y China tiene como una de las víctimas más sufridas al precio de la soja en el país norteamericano.
La respuesta de China frente a los aranceles impuestos por EE.UU. no se hizo esperar. Con el 25% de aranceles a la importación de productos estadounidenses, el gigante asiático va a provocar una situación extremadamente tensa entre el gobierno estadounidense y los agricultores norteamericanos.
Obviamente, en sus inicios el conflicto afecta el precio de la soja en general. Pero conforme va pasando el tiempo, las bajas en Chicago no son acompañadas en la misma proporción en los mercados como los de Brasil y Argentina.
El mercado global de la soja, si bien a medida que pasa el tiempo se pone más difícil, es claramente favorable al sur del mundo. Los valores FOB de Sudamérica tienen una brecha cada vez más acentuada con los FOB Chicago.
Pero sea lo que fuere, es muy visible la tendencia a la baja en los precios internacionales. En abril pasado, la soja para entrega en mayo de 2019 llegaba a 306 dólares por tonelada. Hoy el mercado ofrece 275 dólares en la misma posición.
La razón de este declive está más bien en las expectativas de crecimiento para el mundo que, a consecuencia de las políticas proteccionistas, se muestran más negativas que hace unos meses atrás.
Además, el dólar sigue fortaleciéndose respecto a las demás monedas y las perspectivas productivas para EE.UU. son muy buenas. En principio, se viene una cosecha excelente…
Ustedes preguntarán: ¿y el conflicto entre EE.UU. y China? Pues bien, claramente, éste ha sido la bisagra para entrar en un escenario de precios en baja. Pero como lo venimos afirmando, no es el único motivo. Pues a la larga, la brecha entre los precios de EE.UU y Sudamérica habrá de continuar ampliándose.
Vamos a los hechos. Hace más o menos un mes, las autoridades de China autorizaron la importación de 100.000 toneladas de aceite de soja de nuestro país y además, comenzaron a liberar los aranceles para el ingreso de harina de soja, de Brasil como de la Argentina.
En este nuevo cuadro, no les preocupa tanto la industrialización local de la soja. Ahora la prioridad está en tener el suficiente abastecimiento de harinas y aceites de soja.
¿Y qué pasa en nuestro país? Se estima que alrededor de 10 millones de toneladas de soja permanecen sin vender. Lamentablemente, la disponible cotiza a 280 dólares y la nueva en el Matba baja a275.
Puede bajar más aún. Es muy probable que sí. No olvidemos la fortaleza del dólar y la producción en EE.UU. Sólo la suba del petróleo podría ayudar a que la baja no se efectivice.
En tanto, Trump, ha solicitado a los demás países que no adquieran petróleo de Irán, a partir del 4 de noviembre próximo. No olvidemos que Trump se retiró en mayo pasado de un acuerdo nuclear con Teherán Los precios del petróleo han subido.
Los futuros del petróleo Brent, referencia para los precios del petróleo fuera de Estados Unidos, se ubican en 79,36 USD por barril, subiendo.