UPL comenzó a producir en su planta de Abbott, provincia de Buenos Aires, dos de sus principales soluciones para la protección de cultivos. Se trata de sus herbicidas a base de glufosinato de amonio y s-metalocloro, dos productos estratégicos para la marca que llegaban importados desde la India hasta que la compañía decidió incorporarlos a las líneas de elaboración local.
“Queremos que la producción en el país siga creciendo porque nos permite ser más competitivos en costos y tener una mayor agilidad en la provisión de estas soluciones que están cada vez más presentes en la consideración de los productores y asesores técnicos a la hora de planificar las estrategias de protección para los cultivos”, aseguró Andrés Bottino, gerente de Marketing de UPL, quien agregó: “Además es gratificante darle trabajo a una fábrica argentina, contribuyendo a sostener y generar empleo en el país”.
Los herbicidas a base de glufosinato de amonio son productos que adquirieron gran relevancia en el mercado local por su eficiencia de acción sobre los maíces LL, así como áreas sin cultivos y frutales, entre otros. El glufosinato de amonio de UPL, llamado Lifeline, se destaca por tener la concentración de principio activo más alta del mercado (28%) y poseer banda azul.
El s-metalocloro, por su parte, es un herbicida pre emergente de acción sistémica muy utilizado para el control de un amplio espectro de malezas de hoja angosta y algunas de hoja ancha en maíz, girasol, soja, sorgo granífero (tratado con antídoto), algodón, poroto y tabaco. El s-metalocloro, denominado Strim UPL, también es reconocido por la concentración de su principio activo (96%).