RIO GALLEGOS.- Con alegría y también con moderación, los productores patagónicos tomaron así el anuncio del ingreso de carne bovina y ovina de la Patagonia al mercado de Japón. La condición de zona libre de aftosa sin vacunación pone a la región en primer lugar para ingresar al preciado mercado nipón.
Los productores de la Patagonia Sur coinciden en afirmar que toda apertura de mercados es una oportunidad, además de permitir colocar un producto de alta calidad como es considerada la carne ovina patagónica. Sin embargo, creen que las exportaciones recién se darán con la próxima zafra, luego que se supere un delicado y minucioso trámite de autorizaciones y controles en los frigoríficos que se encuentren habilitados.
En tanto, en Viedma, Río Negro, Fridevi, el principal frigorífico de carne
bovina, se ilusiona con concretar la primera exportación en julio. "Si se
concreta, será la primera vez en la historia que se exporta carne vacuna desde
cualquier país de Sudamérica a Japón", dijo a LA NACION, Sergio Seisdedos,
gerente de la firma.
El anuncio del ministro de Agroindustria de la Nación, Luis Miguel Etchevehere, sobrevino tras una reunión con su par japonés, Ken Saíto. Si bien no hay fechas concretas, desde el Ministerio afirmaron que la apertura del mercado japonés para las carnes argentinas sería a mediados de año. Es una apertura "simultánea" de carne bovina y ovina desde la Patagonia y, recíprocamente, carne bovina japonesa.
Algunos frigoríficos tienen conversaciones más avanzadas, como es el caso del frigorífico Estancias de la Patagonia, una sociedad anónima que nuclea a productores de Río Gallegos.
"Si bien la región no es un mercado de volumen, tenemos una excelente
calidad; se vende un nombre que es Patagonia, lo que le agrega mucho valor al
producto, en tanto que se podrá acceder a un mercado restringido y de alto
valor", señaló Álvaro Sánchez Noya, presidente de Estancias de la Patagonia.
Los frigoríficos ya saben que será carne con cortes, envasado al vacío, posiblemente la chuleta francesa o más conocida como la costillita con carne, que suele ser uno de los preciados platos de los restaurantes. "Ya hemos tenido varias visitas comerciales, nos han auditado desde lo tecnológico hasta lo bromatológico", detalló Sánchez Noya, que destacó la medida, pero moderó la expectativa.
En la Argentina sólo hay tres frigoríficos autorizados para exportar carne ovina. Los tres están en esta ciudad. A Estancias de la Patagonia se suman Faimali y Montecarlo. Eduardo Nuñez, titular de este último frigorífico, también celebró la medida, aunque consideró que recién impactará en la zafra 2018/2019. "Es una buena medida; lo es cualquiera que sea abrir mercados externos", afirmó Nuñez a LA NACION. "Creemos que el de Japón será un mercado de buenos precios", añadió.
Para el senador Eduardo Costa, principal referente de Cambiemos en la provincia, la medida servirá para potenciar la industria en la región patagónica, generando oportunidades de trabajo y desarrollo local. "La generación de empleo es clave para nosotros y para el gobierno nacional. Por eso estamos trabajando para impulsar la venta de nuestros productos al exterior, fomentando a las pymes y las empresas locales para que puedan exportar y lo hagan de manera sencilla. Apostamos a la producción local y a nuestros emprendedores para generar trabajo en la región", sostuvo Costa.
De acuerdo a datos de la Federación de Instituciones Agropecuarias de Santa Cruz (FIAS), en la provincia salen a la venta unos 600 mil ovinos, -de los cuales el 70% son corderos-, que suman casi 9 millones de kilos de carne por un valor mayorista/FOB de unos US$45 millones al año.
Según la entidad, el 70/80% se consume en Santa Cruz, el resto de la Patagonia y Buenos Aires, en tanto que el restante porcentaje se exporta a la Unión Europea, Brasil, Israel y Medio Oriente. Se considera que con un tipo de cambio más competitivo se podrá aprovechar la apertura de nuevos mercados.
Con un buen panorama de clima y muy buenos precios para la lana, se espera seguir aumentando la producción ovina en Santa Cruz, de 2,4 millones de cabezas actuales a 2,7 millones en 2025.
Mucho dependerá de las lluvias, que en 2017 y 2018 vinieron muy bien. En 2015/2016, la situación fue desastrosa por la sequía y se declaró la emergencia agropecuaria para el 60% de los establecimientos. Los objetivos de crecimiento son tangibles, pero también dependen de que se controle el crecimiento del guanaco, que sigue aumentando un 10/15% anual y que hoy muy probablemente ya estén rondando los 2 millones de cabezas en Santa Cruz.
En Chubut, la noticia sobre Japón también tuvo buena repercusión. Enrique Grant, presidente de la Sociedad Rural de Comodoro Rivadavia, la calificó de positiva y consideró que va a potenciar el mercado para poder ubicar sus productos. "Si bien no tenemos una gran producción bovina, si la tenemos de ovinos. Los últimos dos años resultaron beneficios para el campo en Chubut y tuvieron un impacto directo en el aumento de la majada", detalló Grant a LA NACION.
El acuerdo con Japón encuentra al campo de Chubut bien parado. "Tuvimos buenos inviernos, un buen precio de la lana y la suspensión en las retenciones, lo que provocó un incremento en la zafra. El stock ovino de Chubut ronda los 3.600.000 cabezas. De la zafra anterior a esta estimamos que el stock se incrementó entre 300.000 y 400 mil cabezas", detalló Grant.
Para carne bovina, las expectativas sobre la posible exportación al mercado nipón varían según la región de la Patagonia que se consulte. Los productores chubutenses consultados consideran que la apertura los beneficiará de manera indirecta. Si bien aún no tienen volumen para exportar, los beneficiará en tanto se ampliará el mercado interno donde se abrirán horizontes para colocar sus productos.
Contactos por precios y cortes
En Río Negro, el frigorífico del Valle Inferior, Fridevi SA, espera poder colocar la primer partida de carne bovina en tierras japonesas el mes próximo. "Nuestra idea es generar esquemas con estabilidad de provisión y, aunque no sean volúmenes grandes, que sean de alta calidad y perdurables en el tiempo", dijo Sergio Seisdedos, gerente general de la firma con sede en Viedma.
El frigorífico rionegrino produce carne bovina para el mercado interno desde 1983 y está calificado como el proveedor más importante de carne vacuna de toda la Patagonia, abasteciendo a firmas como La Anónima, Coto y Cencosud. Faena entre 5000 y 6000 cabezas por mes.
"Ya hemos tenido visitas en nuestra planta industrial de dos importantes empresas japonesas que están interesadas en comprar carne argentina. Ahora deberemos trabajar con ellos para ver qué cantidad de cortes, precios y volúmenes pueden hacer el negocio interesante para ambos.", detalló Seisdedos. Sobre los protocolos requeridos, desde la firma explicaron que los tienen cumplidos y la planta está en condiciones para exportar a Japón. Solo restaría alguna formalidad de parte de Japón para comenzar con las ventas a ese mercado.
Una parte de la producción de la empresa se exporta a la Unión Europea dentro de la cuota Hilton. En los últimos años ha embarcado entre 200 y 250 toneladas anuales, con un acuerdo de provisión con productores con un incentivo para el engorde de novillos.
Fridevi ha realizado una inversión de más de 6 millones de dólares entre 2003 y 2007 para poder habilitar la planta con destino a la exportación. Llevaron adelante la inversión pese a los vaivenes que tuvo la política ganadera en el país en los últimos años. En la firma consideran que haber seguido con su plan hoy les permite aprovechar las oportunidades que se están abriendo en los mercados internacionales para la carne de la Argentina.
Con la colaboración de Ana Tronfi, desde Chubut
Por: Mariela Arias