Mientras las cúpulas de las gremiales del campo tenían, cada una por
separado, reuniones de comités directivos, en las que se analizaron las últimas
jornadas, el encarecimiento del financiamiento por la suba de tasas de
referencia y los vaivenes del dólar que hicieron al gobierno negociar nuevamente
con el FMI, la soja volvió a tocar un nuevo máximo nominal en pesos sobre
Rosario: $ 7200 la tonelada, 5,88% por encima del cierre previo.
El repunte diario se dio como el jueves pasado, cuando la escalada cambiaria
dejaba al dólar por encima de $ 23,5 en la previa al mensaje presidencial en el
que se remarcó que iniciaba las conversaciones con el Fondo Monetario
Internacional (FMI).
El maíz también mejoró, 5% en este caso, y cerró en $ 4250 la tonelada,
también un máximo nominal, lo que refuerza las preocupaciones de otras
actividades, como la ganadería de carne y leche, que depende del cereal para
alimentar a su rodeo.
La oferta de los exportadores mejoró sobre las pizarras tras dos días en
baja, viernes y lunes, que coincidieron con jornadas de una relativa mayor
tranquilidad en el mercado de cambios.
La soja local viene apreciándose no solo por la suba del dólar, sino también
por la escasez de mercadería disponible por el recorte productivo que dejó la
sequía de cuatro meses. Apuntaló el alza, la mejora que los futuros de la
oleaginosa registraron en Chicago.
"E mercado de granos contó con ofertas de compras que superaron notablemente las pronunciadas en la rueda anterior, acompañada por importantes volúmenes de comercialización" dijo la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en su reporte diario.