La persistencia de masas de aire de origen tropical sobre la región pampeana ha cambiado por completo el contexto de las condiciones meteorológicas y está abasteciendo con muy buenas precipitaciones a gran parte de la región pampeana.
Las anomalías dinámicas del sistema de alta presión del Atlántico son la gran fuente de volatilidad climática para esta región de Sudamérica. Estas anomalías se pueden generar a partir de forzantes de escala planetaria como los fenómenos ENSO (El Niño/La Niña) u complejidades de la misma escala regional. Cuando el sistema de alta presión logra un anclaje en una posición continental, el resultado es una ineficiente entrada de aire tropical, estabilidad en la atmosfera media y temperaturas por encima de los valores normales, todas situaciones que se pueden reconocer fácilmente en un recorrido por el último semestre cálido. Desde mediados de marzo, la zona de alta presión encontró una posición más cercana a su lugar estadístico, la señal sobre el transporte de humedad fue rápida y finalmente llegamos a este abril con tendencia a cerrar con acumulados pluviales por encima de los valores normales que incluso en las últimas horas han alcanzado zonas del sudoeste bonaerense.
El paso del mes de abril encuentra al centro norte de la Mesopotamia y al NEA en general con una mala respuesta pluvial. A diferencia de una seca de gran escala, comienzan a darse alternancias de áreas con oferta de agua antagónica. Basta recordar que donde ahora no está lloviendo, se presentó en marzo una importante sobreoferta de agua. Este tipo de alternancias espaciales en la distribución de las lluvias, son más reconocibles y por lo general no tienen el impacto negativo que propició la seca del semestre cálido. Para el este del NEA, claramente el mes de mayo es un período en que las precipitaciones pueden mostrar una recuperación.
De cara a satisfacer el objetivo de recomponer las reservas para la implantación de trigo en la zona núcleo tributaria de Rosario hasta mediados de mayo, la situación va evolucionando favorablemente. Las próximas jornadas pueden estar caracterizadas nuevamente por lluvias de gran cobertura y volumen. Aunque parezca increíble con las precipitaciones previstas para las próximas jornadas, algunos sectores de la zona núcleo nuevamente presentarán excesos hídricos, algo impensado a finales del mes de marzo. Por lo pronto las reservas muestra el corrimiento de la seca hacia zonas donde la carencia de humedad es más habitual en esta época del año.
