Los integrantes del Consejo Directivo Central de la Federación Agraria Argentina, reunidos este jueves 25 en Rosario, coincidieron en un difícil diagnóstico para los chacareros: “El presidente Macri le dijo a los CEOS de las multinacionales en Davos que él corta el pasto para que ellos jueguen. Mientras tanto, los pequeños y medianos productores venimos perdiendo por goleada”, sostuvieron. Y decidieron convocar en febrero y marzo a reuniones de las entidades de base federadas, para analizar los pasos a seguir.
Los directores de FAA de todo el país advirtieron sobre el deterioro constante de los pequeños y medianos productores y ratificaron lo que la conducción de la entidad había planteado al ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, en audiencia a comienzos de enero. Y se enumeraron algunos de los temas urgentes: “El nivel de endeudamiento de chacareros con las cooperativas creció un 20 por ciento en un año, con tasas de interés altísimas y el 85 por ciento de la actual campaña de soja ya vendida por parte de los pequeños productores. A lo cual debemos agregar el problema de la pérdida de rindes por una sequía que persiste en la zona núcleo. Además, 2017 cerró con menos cantidad de tamberos y caída de exportaciones lácteas. En las economías regionales, podemos mencionar los casos de productores que venden la ciruela o el damasco a 2 pesos el kilo, muy por debajo de los costos para producir, o la crisis de la actividad azucarera, que llevó al cierre del ingenio San Isidro”.
También se analizaron los aumentos de los combustibles en los últimos meses y se mencionó que FAA ya solicitó al gobierno nacional mecanismos para acceder a un gasoil con precio especial para el que produce. “Hace tiempo venimos pidiendo políticas públicas diferenciadas, con estímulos que reconozcan región y escala, para poner equilibrio en una economía cada vez más concentrada”, dijeron. En este sentido, se analizó la reforma tributaria aprobada en diciembre último: “La carga impositiva era alta hasta ahora y lo que viene por delante es aún más difícil. Y al mismo tiempo que nos alejan del crédito y nos suben costos y tarifas, abren más importaciones y nos piden que seamos competitivos”.
Por último, los directores de FAA plantearon la necesidad de instalar estos debates en la agenda pública. “En un país con numerosos problemas irresueltos, se suman los del pequeño productor abundan. Por eso pedimos al gobierno nacional, así como a las administraciones provinciales y los diferentes espacios políticos, que tomen estos temas como parte de su preocupación. Y apelamos a que suceda lo mismo en el ámbito parlamentario. En 2017 no se sancionó ni una ley a favor de los pequeños y medianos productores. Si este año vamos por el mismo camino, no se hará más que acelerar nuestra extinción y agravar la crisis del interior profundo”.