Si bien los incendios durante la cosecha ocurren desde 1900, su frecuencia aumentó. De acuerdo con los especialistas del INTA esto se debe a numerosos factores entre los que se destacan el aumento en la cantidad de maquinarias involucradas con gran capacidad de trabajo que permiten alargar las jornadas, una ineficiente limpieza de sus zonas críticas, sumado a las condiciones atmosféricas de alto riesgo de incendio como las altas temperaturas, vientos intensos y baja humedad relativa.
Para Santiago Tourn –especialista de la Unidad Integrada del INTA Balcarce– es “fundamental” tomar conciencia del riesgo de incendios a los cuales están sometidas las maquinarias, los campos y el suelo. “Estos eventos generan grandes pérdidas económicas y de calidad de suelo”.
En este sentido, el técnico recomendó realizar una correcta y eficiente limpieza de los sectores más vulnerables de las maquinarias: motor, trilla, separación y limpieza, cabina y cabezal. Para esto, recomendó utilizar la sopladora, al menos tres veces al día en todos aquellos sitios de acumulación de granza.
Así mismo, recalcó en la importancia de eliminar toda fuga de combustibles o lubricantes, engrasar periódicamente los rodamientos y revisar su estado para evitar sobrecalentamientos. También señaló la necesidad de incorporar sistemas de detección de incendios y de extintores en las máquinas.
“Es importante llevar en la cosechadora al menos dos extintores clase A, además del reglamentario clase ABC y, adicionalmente, contar con envases de agua con gas para poder llegar a rodamientos”, agregó Tourn.
Otro aspecto a tener en cuenta a la hora de prevenir un incendio durante la cosecha es el de evitar trabajar con condiciones ambientales de riesgo con más de 35° C de temperatura, menos de 30 % de humedad relativa y más de 35 km por hora de viento, como así también horarios de entre las 12 y las 15 horas.
Entre las recomendaciones técnicas, el especialista también se refirió a la necesidad de cubrir la salida de los tubos de escape de los tractores y cosechadoras con mallas metálicas que impidan la salida de chispas de gran tamaño o carbones encendidos y los tanques de combustible con tela ignifugas, ya que esto disminuye el riesgo de que se prolongue un incendio hacia allí.
A la hora de cargar los camiones o armar silo bolsa se deben realizar en zonas sin rastrojo y alejados del lote en cuestión. También es importante evitar circular por el lote con vehículos bajos, ni fumar durante ni cerca de la labor.
“En el caso de un principio de incendio en la cosechadora –advirtió Tourn– no se debe continuar trabajando. Resulta esencial detener la cosecha y realizar una limpieza exhaustiva de la maquinaria”.
Durante la campaña 2017/18 se va a generar un sistema de alerta de riesgo de incendios semanal (Índice de riesgos de incendios en cosecha del Sudeste Bonaerense, IRICSE) desarrollado por responsables de la Unidad Integrada (INTA-FCA), la Asociación de Ingenieros Agrónomos de Balcarce y la asociación de bomberos voluntarios de dicha ciudad. Fuente: INTA