La intrascendencia definió al USDA, que lo único que hizo fue un mínimo retoque de exportaciones (-0,6 M tn) y un marginal incremento de uso para semilla. Esto solo se tradujo en un aumento de stocks finales de 11,6 M tn a 12,1 M tn. De fondo, el ratio stock/consumo, es decir, lo que sobra en el mercado interno luego de darle todos los destinos posibles, volvió a los dos dígitos, y alcanzó los 10,3 % desde los 9,8 % de noviembre.
Con respecto al maíz, el hecho de que no recortaran el saldo exportable fue de por sí un dato positivo (dado el marcado retraso actual de los embarques), y además, se vio un aumento en el uso para etanol, que generó una mínima caída de los stocks finales, que pasaron de 63,2 M tn a 61,9 M tn. Incluso con la caída consecuente del ratio stock/consumo a 16,8 %, estos niveles de stocks son los más altos desde la campaña 2005/06.
En lo concerniente a la producción sudamericana, no modificaron los valores ni para Argentina ni para Brasil. En soja, seguimos en 57 M tn y en maíz en 42 M tn. Brasil quedó en 108 M tn de soja y 95 M tn de maíz.
El mismo día del USDA, la CONAB suele publicar sus propias estimaciones. Arriesgaron 109,2 M tn de soja vs 107,5 M tn del mes pasado, 4,8 M tn menos que el año pasado. Afirman que las buenas condiciones recientes permitirían alcanzar los 31,23 qq/ha de promedio nacional, que si bien es un valor muy alto para Brasil, está 2,4 qq/ha por debajo de la campaña pasada. Además, Abiove hizo lo suyo, aumentando la estimación de 108,8 M tn a 109,5 M tn. A su vez, ven a la demanda fortaleciéndose, tanto interna como externa, lo que los impulsó a aumentar las exportaciones de 65,5 M a 67,8 M tn y la molienda de 41,5 M tn a 43 M tn.
En pocas palabras y a modo de conclusión, podemos afirmar que hoy por hoy lo que importa es el mercado climático sudamericano y el escenario de fondo son altos stocks y una oferta pesada, que dada la fortaleza de la demanda, en lo que respecta a los precios, permite movimientos menores hasta que no veamos algún traspié productivo. El maíz se ve en la misma situación, solo que la demanda no es tan fuerte y el sobrante genera que continuemos en un acotado rango cercano a los mínimos en CBOT.–––
De aquí en adelante, aprovechar las subas como para cerrar precios de venta a mayo de u$s 270 /tn, que nos arrojan márgenes muy atractivos. Vender mínimamente aquella proporción que nos permita cancelar los compromisos en pesos en la post-cosecha, con cobertura del tipo de cambio en lo posible.
Para el cereal, el gran target para el maíz tardío es u$s 150 /tn. A ese nivel, no escatimar ventas, que de darse una siembra normal, abundará la oferta aquí y en Brasil. Para el maíz temprano, ser más cautos a la hora de cerrar negocios, porque la floración ya comenzó en muchas zonas y el estrés hídrico en estas instancias repercute directamente en el rendimiento. Recordemos que hoy por hoy, el maíz marzo/abril es casi una primicia, y con la tendencia a sembrar cada vez proporcionalmente más maíz tardío, el maíz temprano vale, y así lo “pricea” el mercado al momento. Hay que hacer la salvedad, sin embargo, del gran carry-out que nos deja la campaña 2016/17, que se transforman en stocks iniciales de la actual. Según el Minagri, serían 9,89 M tn que quedarían como stocks finales.
Por Mariano Bignon – Analista de Mercado en BLD
Fuente: Agroeducacion