El valor del trigo de los Estados Unidos cayó ayer hasta uno de los niveles más bajos del año en las Bolsas de Chicago y de Kansas, donde el principal factor de presión bajista continúa siendo el agresivo programa de exportaciones de Rusia, que, como máximo proveedor global del grano fino, amenaza con quedarse con tradicionales compradores de la mercadería estadounidense.
Al momento de fijar los ajustes de la rueda, las pizarras de Chicago
mostraron ayer quitas de US$ 2,57 y de 2,21 sobre los contratos diciembre y
marzo del trigo, cuyos valores quedaron en 152,76 y en 159,74 dólares por
tonelada. En el balance semanal, estos contratos resignaron un 2,69 y un 1,98%
frente a los precios vigentes el viernes anterior, de 156,99 y de 162,96
dólares.
En Kansas, las mismas posiciones perdieron ayer US$ 2,39 y terminaron la jornada con ajustes de 152,30 y de 158,73 dólares por tonelada. En la semana ambos contratos descendieron un 1,78 y un 1,71% frente a los valores del cierre del segmento precedente, de 155,06 y de 161,49 dólares.
En ambas Bolsas estadounidenses, el registro más bajo del año para el trigo
se anotó el 29 de agosto, cuando el contrato septiembre cayó hasta los 147,99 y
hasta los 145,97 dólares por tonelada, respectivamente.
Sin embargo, para la posición diciembre el punto más bajo de 2017 fue el marcado ayer que, además, reflejó un quebranto del 28,32 y del 30,25% respecto del máximo de contrato, registrado el 5 de julio, cuando las pizarras reflejaron un ajuste de 213,12 y de 218,35 dólares en Chicago y en Kansas, respectivamente.
Ayer, en una jornada de negocios reducida tras la celebración el jueves del Día de Acción de Gracias, el dato que desencadenó las bajas fue el informe semanal sobre las exportaciones estadounidenses publicado en el inicio de la rueda por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. En él, el organismo relevó ventas de trigo por sólo 199.900 toneladas, por debajo de las 489.300 toneladas del reporte precedente y del rango previsto por el mercado, de 350.000 a 550.000 toneladas.
El desencanto fue tan notorio entre los operadores que ni siquiera contribuyó a limitar la tendencia bajista la devaluación del dólar frente al euro, que en la semana fue del 1,07%, tras pasar la paridad de 1,1799 a 1,1925. En teoría, ese movimiento de las monedas mejora la competitividad del trigo estadounidense en el mercado exportador, algo que, junto con los actuales valores deprimidos, podría ser la combinación necesaria para una eventual reconstrucción de las cotizaciones en el corto plazo, al hacer más pareja la disputa por el comercio global con Rusia.
En el mercado local del trigo los precios del cereal disponible se mantuvieron estables, con ofertas de los exportadores de $ 2800 por tonelada para Bahía Blanca y para Necochea, y de $ 2700 para el Gran Rosario.
El trigo con entrega en enero se cotizó ayer a US$ 160 por tonelada para los puertos del sur de Buenos Aires, donde no implicó cambios, y en Rosario, donde representó una baja de 2 dólares. En el Mercado a Término de Buenos Aires el ajuste de la posición enero fue US$ 160,50 y representó una mejora de 0,50 dólares.
En su último reporte sobre carga de buques programada, la Bolsa de Comercio de Rosario indicó que entre el 22 de noviembre y el 9 de diciembre deben salir desde las terminales del Gran Rosario 354.500 toneladas de trigo; desde Bahía Blanca, 81.000 toneladas, y desde Necochea, 59.250 t.
El martes, la Dirección de Mercados Agrícolas del Ministerio de Agroindustria de la Nación informó que al 15 del actual la exportación compró 4.794.100 toneladas de trigo de la nueva cosecha, un 69,55% más que un año atrás. Al 23 del actual, las declaraciones Duradas Juradas de Ventas al Exterior de grano 2017/2018 suman 1.747.193 toneladas.
Acerca de la molinería, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó ayer que ofrecieron entre 2700 y 3150 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.
Retrocedió la soja
Por tonelada de soja las fábricas ofrecieron $ 4500 para la zona del Gran Rosario, $ 50 menos que anteayer. En el mismo sentido se cotizó la oleaginosa para las entregas en mayo, al pasar de 262 a 260 dólares.
El origen de la tónica bajista estuvo en Chicago, donde los contratos enero y marzo de la soja perdieron US$ 1,47 y 1,37, al cerrar con ajustes de 364,96 y de 369,19 dólares. Los factores negativos fueron el reporte semanal sobre las exportaciones de EE.UU., que marcó un volumen inferior al esperado por el mercado, y el rápido avance de la siembra en Brasil. En ese sentido, ayer AgRural informó que se sembró con soja el 84% de los 34,70 millones de hectáreas previstos, contra el 83% vigente un año atrás y el 79% promedio de los últimos cinco años.
Relevan altos rendimientos en la zona núcleo
La Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario informó ayer que la cosecha de trigo en la zona núcleo avanza con marcas que siguen sorprendiendo. "El rinde promedio ronda los 43 quintales por hectárea, con un techo sostenido en 60 quintales", explicó.
El informe agrega que aunque en algunos lugares hay problemas de calidad, "los primeros resultados indicarían que los valores de proteína y de gluten son levemente mejores que los del año pasado".
Acerca del clima, la GEA advirtió un cambio negativo. "La falta de agua se siente en la región central y Córdoba es la provincia más afectada, donde la sequía ya es más que inquietante". Y agregó que en esa provincia el tiempo seco y ventoso, con tormentas que sobrevuelan y amenazan con desatar diluvios que no llegan, dejó "la mitad de los suelos cordobeses con condiciones de sequía, mientras que el resto evidencia condiciones regulares". Esta falta de humedad, además, acecha las siembras de maíces tardíos y de sojas de segunda.