CÓRDOBA.- La producción de maíz en la provincia alcanzó en la última campaña
los 15,8 millones de toneladas, un 57% más que la campaña anterior. Además, el
rendimiento ponderado fue de 81 quintales por hectárea, dos quintales por arriba
que el ciclo anterior y nueve por encima del promedio histórico (fue de 72
quintales por hectárea).
Respecto a los ingresos generados por el cultivo, el valor bruto de la producción fue de US$ 2417 millones, el mayor valor de las últimas tres campañas.
Los datos se desprenden del último informe de la Bolsa de Cereales de
Córdoba, que también da cuenta de un incremento de la superficie sembrada del
42% y del 2% del rendimiento. La campaña fue récord.
En todos los departamentos de la provincia, el rendimiento, al igual que 2016, superó el promedio histórico de los últimos 10 años. Del total sembrado, el 24% correspondió a fechas tempranas (hasta el 1° de noviembre), mientras que el 76% restante a siembras tardías, especialmente en el norte provincial.
El impacto por anegamientos disminuyó un 21% respecto al ciclo anterior, con 89.400 hectáreas, valor que equivale a un 4% del área sembrada. Los departamentos más afectados fueron General Roca (24.250 hectáreas), Marcos Juárez (10.900 hectáreas) y Presidente Roque Sáenz Peña (10.200 hectáreas).
Según la entidad, sobre el final del ciclo también se dieron episodios de volcaduras de plantas, producto del añejamiento del material en pie en los lotes por la ralentización de la trilla, si bien esto no representó un aumento de la superficie perdida. Sí impactó sobre los rendimientos, ocasionando reducciones a nivel de lote de hasta 15 quintales por hectárea.
Las incidencias climáticas durante la trilla fueron similares a las ocurridas durante la campaña 2015/16, priorizándose nuevamente la cosecha de soja por sobre los otros cultivos.
Durante el ciclo del cultivo (septiembre -mayo) se registraron precipitaciones por debajo del promedio histórico (2007-2017), salvo en los departamentos del sur provincial, sumado a San Justo, en donde la suma de las mismas fueron superiores a los 700 milímetros.
En los meses en donde se llevó adelante la trilla (mayo-septiembre), los departamentos General Roca y Presidente Roque Sáenz Peña registraron abundantes precipitaciones, lo cual generó un atraso en la cosecha del cultivo y acentuó los problemas de anegamiento que se presentaron durante todo el ciclo.
Para la entidad, el valor bruto de la producción de maíz en Córdoba fue de US$ 2417 millones, alcanzando el mayor valor de los últimos tres años gracias al incremento en el área sembrada que compensó el menor precio de exportación del cereal. Respecto al ciclo anterior, los ingresos potenciales para la provincia fueron un 34% más alto.
El informe destaca que en las últimas dos campañas, luego de la eliminación de las retenciones y los cupos, el precio percibido por el productor se acercó más al internacional.
Entre las hectáreas perdidas por los anegamientos y el impacto sobre los rindes los productores resignaron US$ 111 millones.