Los tratamientos con herbicidas de acción pre-emergente ejercen su efecto sobre las malezas desde las primeras etapas del ciclo de vida, más específicamente durante la germinación y la emergencia, que coinciden con sus estadios más vulnerables y, por tanto, su control es más eficaz. Además, las semillas de las malezas de importancia -por lo general- se encuentran en los primeros 3 a 5 centímetros del suelo. Así, es necesario que el herbicida permanezca activo el mayor tiempo posible para evitar su crecimiento.
En el maíz, como en otros cultivos, existe un período crítico de competencia de malezas. En términos generales dicho lapso coincide con las primeras etapas de crecimiento de las plantas. Impedir la competencia con las malezas en esos momentos es decisivo en la definición del rendimiento potencial, que es considerablemente sensible a la competencia por los recursos. El “overlaping” es la estrategia de manejo que demuestra tener los mejores resultados en el control de malezas, reduciendo su emergencia y el aporte de semillas al suelo. Consiste en el solapamiento de tratamientos de herbicidas residuales con diferentes mecanismos de acción, con un espaciamiento temporal que permita que la residualidad del primero se superponga con el aplicado en segunda instancia. Así, la actividad herbicida permanece lo suficientemente alta en el suelo como para controlar los potenciales flujos de emergencia de las malezas.
Pero a pesar de la eficiencia que han demostrado estas herramientas, en algunas situaciones, la residualidad no ha sido lo suficientemente prolongada como para mantener el lote libre de malezas en la emergencia del cultivo. Se recomienda utilizar un tratamiento pos-emergente para evitar el crecimiento de las mismas y, fundamentalmente, evitar que continúen aportando semillas al suelo. Es frecuente el caso de ciertos herbicidas pre-emergentes muy usados, que en situaciones de abundantes precipitaciones se lavan, son lixiviados hacia aguas profundas, o no se incorporan de forma correcta al suelo, con lo cual aparecen nuevas emergencias de malezas, que competirán con el cultivo afectando el rendimiento del mismo.
Para estas situaciones aparece TEKOVE® (Mesotrione 48 SC), un herbicida sistémico residual selectivo para maíz, especialmente recomendado para el control en pos- emergencia temprana de malezas latifoliadas y algunas gramíneas. TEKOVE® actúa bloqueando la enzima HPPD, irrumpiendo la formación de pigmentos carotenoides, produciendo decoloración en hojas, y posterior necrosis y muerte de plantas de malezas. TEKOVE® posee un modo de acción diferente a los comúnmente utilizados, adecuado para la rotación de los mismos con lo que evita la aparición de malezas resistentes, disminuyendo la presión de selección ejercidas por el uso de herbicidas con el mismo MDA. Este tipo de herramientas son muy efectivas frente a la aplicación de herbicidas hormonales en pos-emergencia del maíz. En muchos casos, y bajo determinadas condiciones ambientales, el uso de hormonales en pos-emergencia puede generar fitotoxicidad que se manifiesta como malformación de hojas, encorvamiento de plantas, tallos quebradizos y/o malformación de raíces adventicias, lo que afecta severamente a la estabilidad de plantas y genera importantes pérdidas de cosecha. Esto último es sumamente importante, en especial en maíces con fechas de siembra tardías porque el cultivo permanece mucho tiempo en el campo hasta que el grano pierde humedad y se puede comenzar a cosechar.
PRIMERO® (Nicosulfuron 75 WG) es otra herramienta de ROTAM® para aumentar el espectro de control de malezas, fundamentalmente en lotes con problemas de gramíneas anuales como Capín, Pasto Cuaresma y Sorgo de Alepo resistente a Glifosato. PRIMERO® es un herbicida perteneciente al grupo de las Sulfonilureas, también selectivo en el cultivo de maíz controlando gramíneas anuales y algunas latifoliadas.
La combinación de ambas herramientas, PRIMERO® más TEKOVE® resulta ser una opción eficaz para el control de malezas difíciles como Yuyo Colorado o Sorgo de Alepo resistente a glifosato, brindando un excelente nivel de control y con ningún tipo de efecto negativo sobre el cultivo, permitiendo al mismo desarrollarse libre de malezas y al mismo tiempo reduciendo su abundancia.
ROTAM® es una compañía multinacional con base de operaciones en Hong Kong, establecida desde hace más de diez en Argentina. Cuenta con un equipo técnico y comercial que trabaja día a día en la búsqueda de nuevas soluciones para los problemas de los productores del campo argentino.