Una copa de leche para paliar la crisis. Esa es la idea que analiza el gobierno nacional para ayudar a los pequeños y medianos productores del país, y a la vez garantizar el consumo de un producto esencial a millones de niños en edad escolar.
Se barajan varias propuestas, pero uno de los borradores más concretos pertenece al senador entrerriano Alfredo De Angeli (PRO) y, según su equipo, ya tiene el aval del Ministerio de Agroindustria, que conduce Ricardo Buryaile, y de la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley. Actualmente, está en etapa de revisión de costos con distintas áreas de las carteras involucradas, y en la Subsecretaría de Lechería ya lo tildan como un tema de la agenda 2018.
Se estima que la compra a pequeños y medianos tambos significaría un 6% de la producción total. Si se toman en cuenta las cifras de 2016 (uno de los años más bajos, con menos de 10 mil millones de litros), la medida afectaría unos 600 millones de litros de leche.
El proyecto todavía no fue presentado de manera oficial. “De Angeli quiere que sea viable antes de llevarlo al Congreso”, aseguraron a PERFIL desde el equipo del senador, quien como presidente de la Comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca recibe el constante reclamo de los productores. Representantes del sector lechero ya están al tanto de la iniciativa y dieron su opinión, pero serán nuevamente convocados cuando el Gobierno saque las cuentas.
Fuentes allegadas a De Angeli confirmaron que el entrerriano también consultó al ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación productiva, Lino Barañao; a empresas que elaboran tetrapack, para envasar la leche larga vida, y a agrupaciones de pequeños y medianos productores. “Es una solución para ellos, que son los que están cerrando los tambos”, explicaron.
Fuente: Infortambo