A partir de un tratamiento de las semillas con compuestos orgánicos que funcionan como estimuladores de crecimiento, se aumentó significativamente el rendimiento del cultivo de trigo. Así lo aseguró un ensayo del INTA publicado en la Revista de Investigaciones Agropecuarias (RIA).
“El uso del promotor a base de compuestos orgánicos como tratamiento de semillas permitió una mejora en el número de granos lo que significó un aumento en el rendimiento en trigo de 350 kilos, un 13 % más”, explicó Marcelo Beltrán, técnico del Instituto de Suelos del INTA Castelar.
El tratamiento está conformado por diversos compuestos orgánicos como vitaminas, ácido fúlvico y urico, además de otros compuestos nitrogenados como aminoácidos o cadena de nitrógenos.
“Estos promotores de crecimiento influyen directamente en el desarrollo de la biomasa y de las raíces de la planta, lo que permite una mayor captura de nutrientes, agua y radiación solar. Esto, eventualmente, lleva a un aumento en el rendimiento”, detalló el técnico.
A su vez, aseguró que la aplicación es bastante sencilla: “Se trata la semilla con esta formulación liquida en el momento de la siembra. Se la deja orear y después se siembra normalmente”.
En cuanto a la especificidad del producto explicó que los hay para cultivos puntuales o bien de amplio espectro, lo que habilita su aplicación tanto en gramíneas –trigo, avena, cebada o centeno– o algunas leguminosas como soja o vicia.
Y aclaró: “Este tratamiento acompaña –no reemplaza– a los productos inorgánicos –como la urea, los fertilizantes nitrogenados o fungicidas– y mejora el estado de las plantas”.
En este sentido, destacó la importancia de difundir el tratamiento con compuestos orgánicos por ser benéfico para las plantas y colaborar con su desarrollo y crecimiento: “Si bien es una práctica conocida desde hace mucho tiempo, el productor no lo tiene incorporado y no lo aplica por no contar con la total seguridad de que irá acompañado por un mayor rendimiento”, reconoció el especialista.