Sin embargo, en poco tiempo más el ingreso de la abultada oferta norteamericana será inminente, y sin dudas, presionará los precios. Comenzando por la demanda, EEUU finalizó el ciclo comercial 16/17 con exportaciones acumuladas de 58,1 mill.tt. de soja, reflejando un aumento del 14% respecto al año anterior (50,8 mill.tt.). De hecho, quedaron pendientes embarques de soja por 2.359.000 toneladas, ya que los compromisos de ventas para el ciclo 16/17 ascienden a 60,5 mill.tt., por encima de la proyección del USDA. En tanto el maíz norteamericano cerró la campaña 16/17 con exportaciones acumuladas por 55,4 mill.tt., siendo este volumen un 20% mayor al registrado en el ciclo 15/16. Para el cereal también quedaron embarques pendientes por 1 millón de toneladas.
Al mismo tiempo, el dólar estadounidense registró bajas, con el índice del dólar tocando su nivel más débil desde enero de 2015. La depreciación de la moneda estadounidense frente a las economías del mundo se tradujo en mayores negocios de exportación de granos para los EEUU. De hecho, el día viernes el USDA informó ventas de soja norteamericanas por 264.000 toneladas de soja con destino a China, la mayor venta diaria reportadas en las últimas 2 semanas y media. China, el mayor comprador de soja del mundo, importó 8,45 millones de toneladas de soja en agosto, un récord para el mes, según cifras de la Administración General de Aduanas de China.
A su vez, la soja continúa obteniendo soporte a partir de la demanda de China, la cual sigue superando las expectativas del mercado. En el mes de agosto, según cifras de la Administración General de Aduanas, mostró nuevamente un sólido ritmo de importaciones, comprando 8,45 millones de toneladas de soja, un récord para el mes. De esta manera, las noticias del mercado subrayan la reciente demanda china, que pareciera poder compensar la presión de la cosecha récord de Brasil de este año y la inminente llegada de la oferta norteamericana.
Por otro lado, en el mercado sigue habiendo preocupaciones ante la sequía presente en el Medio Oeste, la cual se espera que continúe por algunas semanas más. Ante este escenario, los operadores recompraron posiciones. Recordemos que el 10% de la cosecha gruesa se encuentra en una zona afectada por la sequía. Y si bien la situación es un poco mejor que un mes atrás, se encuentra con condiciones mucho peores que el año pasado. Las últimas jornadas tuvieron pocas lluvias, volviendo a reducir la humedad en los suelos norteamericanos, y con temperaturas por debajo de lo normal. Esto podría afectar la última etapa de maduración de la soja y el maíz. Sin embargo, el impacto sería más bien de sintonía fina, ya que los momentos claves para la determinación de rendimiento en general ya fueron superados.
Respecto a los datos de rindes para EEUU, los analistas prevén un leve recorte en los mismos, tanto para soja como maíz, en el informe que emitirá el USDA este martes 12. De acuerdo a la encuesta realizada por Reuters, los participantes del mercado esperan recortes moderados en los nuevos pronósticos el gobierno, ubicando los rindes de maíz en 105,6 qq/ha, por debajo de la cifra actual de 106,4 qq/ha, y 32,8 qq/ha para soja, frente a los 33,2 qq/ha informados en agosto.
Finalmente, en el mercado local se pagaron precios muy atractivos durante la semana que incentivaron nuevamente la venta de parte de productores argentinos. La suba de precios que estuvimos viendo fue vista como una oportunidad de venta.
Fuente: Centro de Gestion Agropecuaria