El valor de la soja argentina se negoció en alza ayer, en sintonía con las
subas externas y gracias a la devaluación del peso frente al dólar, que les
posibilitó a los compradores mejorar sus propuestas en pesos.
Por tonelada de soja con entrega inmediata sobre las terminales del Gran Rosario las fábricas ofrecieron 4200 pesos, 100 más que anteayer. "Durante la rueda se acordaron nuevos negocios por unas 70.000 toneladas, pero el mayor movimiento se dio para las fijaciones, dado que se les pusieron precio a entre 150.000 y 170.000 toneladas", contó a LA NACION una fuente del sector comercial.
Vale señalar que en operaciones puntuales y por volúmenes importantes,
algunos compradores convalidaron hasta $ 4250 por tonelada.
La mejora se replicó en los puertos de Bahía Blanca y de Necochea, donde los compradores ofrecieron 4150 y 4100 pesos por tonelada de la oleaginosa, 150 y 100 pesos más que en la jornada precedente.
En el mercado de las monedas, ayer el Banco Nación reportó un salto de 17,11 a 17,26 en la paridad del peso frente al dólar, según el tipo de cambio comprador (divisa).
También resultó positivo el balance de la jornada para la soja de la próxima cosecha, con entrega en mayo, que se cotizó a 247 dólares por tonelada, con una mejora de 3 dólares. En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones noviembre y mayo de la oleaginosa sumaron US$ 4 y terminaron la rueda con ajustes de 250 y de 251 dólares por tonelada.
Acerca del mercado externo, las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron alzas de US$ 3,12 y de 2,85 sobre los contratos septiembre y noviembre de la soja, cuyos ajustes resultaron de 341,81 y de 342,82 dólares por tonelada.
Además del interés chino por cerrar nuevas compras en los Estados Unidos, el clima fue el principal factor alcista para las cotizaciones de la soja, dado que las lluvias que se registraron en zonas del Medio Oeste fueron mínimas sobre Iowa, el principal Estado productor de granos gruesos estadounidense y el más afectado por el déficit de humedad en la región.
En ese sentido, el mapa de monitoreo de la sequía publicado ayer por el Centro Nacional de Mitigación de la Sequía mostró que si bien el déficit hídrico en Iowa descendió levemente, del 71,47 al 70,84%, se elevaron los porcentajes de áreas con "sequía moderada", del 40,42 al 44,63%, y de tierras con condiciones de "sequía severa", del 12,49 al 13,82%. Además, el organismo estadounidense ponderó un 2,51% de suelos (en el sur del Estado) en "sequía extrema".
Si bien para los próximos 10 días se prevén lluvias por encima de los registros usuales para el Medio Oeste, si éstas no cubren las zonas que necesitan aportes de humedad en forma urgente, los precios de la oleaginosa podrían tender a repuntar.
Respecto del trigo, ayer no hubo cambios en los precios domésticos, dado que los compradores volvieron a pagar $ 2850 por tonelada disponible para Bahía Blanca; $ 2800 para Necochea, y $ 2700 para el Gran Rosario. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los molinos ofrecieron entre 2600 y 3230 pesos por tonelada, según calidad, procedencia y forma de pago.
El trigo de la nueva cosecha, con entrega en enero, se cotizó a 163 dólares por tonelada para Bahía Blanca y a 162 dólares para Necochea y para el Gran Rosario, sin variantes. En el Matba, la posición enero perdió un dólar y cerró con un ajuste de 161 dólares por tonelada.
En los Estados Unidos, el trigo quedó encaminado a completar hoy la sexta semana bajista consecutiva. La posición septiembre del cereal en Chicago y en Kansas perdió US$ 1,93 en ambas plazas y su ajuste fue de 152,12 y de 152,21 dólares. Para evadir el cierre semanal negativo, este contrato debería subir en la última rueda del segmento más de 9 dólares, algo muy improbable.
Recorte en el área de trigo
En su informe semanal, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires redujo ayer en 50.000 hectáreas la superficie destinada al trigo en el actual ciclo y la dejó en 5,35 millones de hectáreas, de los cuales se cubrió el 99,5%. El recorte fue consecuencia de los excesos hídricos que complicaron la siembra en sudeste de Buenos Aires. "Los anegamientos en gran parte del centro y del sur bonaerense ocasionaron pérdidas que impactarán sobre el área que llegará a la cosecha", dijo la entidad.