De no mediar un rescate de última instancia, la empresa despedirá a 40 empleados en medio de una crisis que afecta a todos el sector frutícola del alto valle de Río Negro, por los costos de producción y los bajos precios de comercialización. La firma cuenta con un galpón de empaque y cámaras de frío que dejarían de funcionar definitivamente en las próximas semanas. Desde la empresa sostienen que la difícil situación del sector frutihortícola le impide cumplir con los compromisos con sus empleados.
Es la tercera gran firma del sector que cierra plantas y despide empleados en la provincia. Antes, hubo despidos de Expofrut, por el levantamiento de muchas hectáreas de frutales, y cerró la tomatera Canale, junto a la pérdida de fuentes de trabajo en otros galpones.