Las exportaciones de azúcar crecieron 211% en volumen y 230% en valor en 2016, considerando las ventas al exterior en año calendario.
Según datos del Ministerio de Agroindustria, en 2015 se habían colocado en el exterior 182.128 toneladas por US$ 71.361.117. En tanto, en 2016 se vendieron 567.995 toneladas por un monto de 236,2 millones de dólares.
El boom sobrevino luego de que el Gobierno se propusiera sacar al exterior más de 400.000 toneladas que sobreofertaban el mercado local, deprimiendo además los precios para los productores.
"Nos habíamos propuesto exportar 467.000 toneladas para que no haya excedentes y terminamos colocando 100.000 toneladas más que eso", dijo a La Nación Néstor Roulet, secretario de Agregado de Valor del Ministerio de Agroindustria.
La salida de la mercadería al exterior, con la consiguiente baja de cualquier excedente interno, se facilitó por los cupos de exportación que se dieron a los ingenios.
Además, para aliviar la situación en el mercado local se subió 2% el etanol en las naftas (de 10 a 12%), lo que significó el uso de 200.000 toneladas de caña de azúcar para ese biocombustible.
El año pasado los productores de caña estaban protestando por sus bajos precios. Según Roulet, que ayer participó de una reunión de la Mesa Sucroalcoholera en Concepción, en la provincia de Tucumán, la bolsa de 50 kilos pasó de 160-180 pesos el año pasado a un valor actual de 480 pesos.