Los eventos climáticos e incendios registrados en las últimas semanas dan
cuenta de una pérdida de más de cinco millones de toneladas en todo el país.
Específicamente, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) proyectó una caída en la
producción que ascendería a 5,2 millones de toneladas y u$s 1050 millones, con
un total de 600.000 hectáreas que quedaron sin sembrar y casi 1 millón sin
cosechar. Con ese recorte, se pasaría de 124,9 millones de toneladas estimadas
para la campaña 2016-2017 del total de granos, a 119,7 millones de toneladas en
la actualidad. En el caso de la soja, de una intención inicial de siembra de
19,65 millones de hectáreas, se calcula que 660.000 se perdieron por los cinco
eventos extremos de lluvias ocurridos en el norte bonaerense y en el sur
santafesino.
En tanto, desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires afirmaron que los excesos
hídricos ya afectan a 1,1 millón de hectáreas sembradas con soja, maíz, girasol
y sorgo. "Lluvias acumuladas durante las últimas semanas sobre gran parte del
área agrícola nacional, generaron anegamientos en lotes implantados, provocando
pérdidas y limitando el normal desarrollo de los cultivos en pie", indicaron. En
total, estimaron que 770.000 hectáreas de soja, 290.000 de maíz, 21.000 de sorgo
y 19.000 de girasol se encuentran afectadas por la situación climática actual.
Por su parte, desde la Federación Agraria Argentina (FAA) advirtieron que no sólo no habrá una cosecha récord de granos, sino que podrían perderse más de 1000 tambos, gran parte ubicados en la cuenca lechera santafesina.