Venimos de dos meses secos y cálidos que afectaron la cantidad y
calidad de las pasturas cultivadas y los campos naturales. Comienza el
verano con pronósticos de temperaturas elevadas y de lluvias por debajo
de lo normal. ¿Cuánto por debajo? Nadie lo puede asegurar. Hay escaso
forraje de calidad, sólo lotes de agropiros y/o festucas bien manejados
y las alfalfas, con lo que es dable esperar que durante los próximos 60
días las condiciones -desde el punto de vista forrajero- empeoren.
Además, en muchos campos se suspendió la siembra de sorgos forrajeros y
para diferir, lo cual agrava la situación, tanto para el verano como
para el próximo invierno.
Esta situación climática desfavorable se produce cuando la mayoría de
los partidos del área de influencia de la EEA Balcarce se encuentran
con la carga más alta de los últimos 15 años. Ello hace imprescindible
tomar medidas para ordenar los rodeos: a).- eliminar toda vaca que no
esté criando; b).- preservar las pasturas, no comiendo al ras (aunque
no alcance el pasto); c).- limpiar agropiros y festucas para
eficientizar el uso del agua.
Recomendamos realizar pastoreos no muy intensos en las pasturas; es
clave dejar un remanente y más ante estas severas condiciones
climáticas. Evitar que el suelo quede desnudo de modo de evitar que la
temperatura a ese nivel no se eleve considerablemente y afecte la
persistencia de las especies forrajeras de valor.
Otro punto a tener en cuenta cuando se pastoreen principalmente
festucas “viejas” en los próximos meses, es la posibilidad de existir
episodios de “golpe de calor” provocados por festucosis. Estos
problemas pueden verse agravados si las pasturas a su vez están
parasitadas por “cornezuelo”, otro hongo que produce las mismas toxinas
que la festuca tóxica. Si esto ocurriese, es imprescindible brindarles
a los animales sombra suficiente y agua de calidad y en cantidad
adecuadas, para que puedan sobrellevar el pastoreo en los días con
temperatura y humedad relativa ambiente elevadas. Desde el INTA
Balcarce se van a realizar alertas periódicas para prevenir a los
productores cuando se acerquen días “peligrosos”.
La condición corporal de los vientres en servicio -salvo excepciones-
es adecuada, lo mismo que los terneros al pie de esas madres. Sin
embargo, teniendo en cuenta lo mencionado anteriormente, habría que
analizar la necesidad de actuar sobre los vientres que están en regular
condición corporal, comenzando con las vacas de segundo servicio -la
categoría más sensible-, para asegurar una buena preñez. Aquí el
destete precoz sería una alternativa para analizar. Por todos los
medios debemos preservar la “fábrica” de terneros. Cada empresa deberá
evaluar sus rodeos y definir los pasos a seguir. Le recomendamos actuar
antes que sea demasiado tarde. Prevenir- anticipar siempre es mejore que curar.
En situaciones similares a las descritas, muchos productores prolongan
el servicio un mes más. A nuestro criterio esa es una mala práctica.
Cuando hay escasez de forraje lo más indicado es destetar los terneros
en forma anticipada. De esa forma la condición corporal de los vientres
mejorará en pocos días y de esa manera podrá comenzar a ciclar
nuevamente.
Los destetes
Por los problemas climáticos señalados, en toda la zona hay granos de
cebada que no dan la base para maltería, triguillo y otros recursos.
Habrá que analizar su utilización en comederos o silos de autoconsumo
para alimentar los terneros destetados anticipadamente. Será clave
acostumbrar a los animales a comer esta “nueva dieta”, comenzando con
poco alimento la primera semana e ir aumentándola en forma gradual
hasta llegar a la dieta definitiva. No olvidar de reponer el alimento
en el silo, preservar en perfecto estado y funcionamiento la/s aguada/s
y, de ser posible, asignarle un lugar con sombra.
Muchos establecimientos que utilizan sorgos-maíces para pastoreo y/o
para diferir, por la sequía vienen mal implantados o no los pudieron
sembrar (alta devolución de semilla). Los sorgos que se vayan a
pastorear en el verano van a tener crecimiento limitado por agua y con
posibilidades de contener elevadas concentraciones de Nitrato, tanto en
suelo como en planta. Evaluar los ingresos de pastoreos en cada
parcela. Del mismo modo, tener en cuenta posibles intoxicaciones con
Cianhídrico.
Pensando en el próximo invierno
Para quienes no pudieron implantar sorgos/maíces para diferir, creemos
que la avena es una opción interesante para generar una alta cantidad
de raciones para el próximo invierno. Para aquellos productores vecinos
de Benito Juárez, Laprida, Gral. La Madrid y Olavarría, el sistema de
manejo “Allasia” les resulta conocido y muchos de ellos lo utilizan
frecuentemente. Estas siembras tempranas -con 70-80 kg/ha de semilla de
buena calidad, fertilizadas con P y con un pastoreo precoz para mejorar
el piso y promover un mayor número de macollos-, permiten que estos
verdeos generen un alto volumen de forraje y de calidad, tanto para los
vientres como para la recría. Si todo evoluciona bien, una aplicación
de 120-150 kg/ha de urea a mediados de marzo, permitirá aumentar la
tasa de crecimiento diario de forraje, y con ello, asegurar una dieta
balanceada para los vientres preñados y en restricción o la recría.
En los partidos mencionados sugerimos sembrarla a principios o mediados
de febrero y no antes para evitar daños de tucuras. Monitorear los
cultivos para evaluar presencia de isocas y/o pulgones.
La importancia del agua
Por la persistente sequía han disminuido-desaparecido las lagunas y
bajado el nivel de los arroyos, con lo cual la única fuente de agua
para el ganado es el aportado por los molinos. De allí que consideramos
fundamental prestarle atención al estado y funcionamiento de los
mismos. Revisar y reparar las máquinas, los tanques y los bebederos
antes de tener un serio dolor de cabeza. De nuevo: prevenir - anticipar
antes que lamentar muertes.
Evitar el acceso a zonas con malezas tóxicas de animales no
acostumbrados a pastorear en esos ambientes.
Si bien en enero -en general- no se realizan trabajos en la manga, no
está de más recordar la importancia de realizar los arreos sin apurar
el paso de la hacienda, sin perros y en horas de menos calor. Prever
fuentes de agua en los corrales y evitar encierres prolongados.
Finalmente. Tomar todos los recaudos necesarios para evitar incendios.
Instruir al personal de campo para que actúe responsablemente y ante
cualquier foco de fuego en campo propio o vecinos, avise al cuerpo de
bomberos de la localidad más cercana. Asimismo, sería muy importante
que los municipios realicen un corte de limpieza en las banquinas de
las rutas provinciales para evitar que, al estacionar cualquier tipo de
vehículo sobre ellas, se inicien focos de incendio cuando los caños de
escape tomen contacto con la broza.
Artículo de: Horacio Abel SARLANGUE