De principio a fin, la oferta abierta de las fábricas fue ayer de $ 4000 por tonelada de soja con entrega inmediata para las terminales del Gran Rosario. Buena parte de los vendedores ubicó su exigencia en $ 4100, un nivel hasta el que ningún integrante de la demanda se aproximó.
Fuentes del sector comercial reconocieron que algunos compradores llegaron a convalidar hasta $ 4050, en operaciones puntuales y bajo condiciones específicas. "Incluso con las operaciones que se pudieron hacer en ese tope, el volumen total comercializado no superó las 50.000 toneladas de soja. Muy flojo estuvo el mercado", reconoció un operador.
En función del FAS teórico calculado por el Ministerio de Agricultura de la Nación, de $ 3680 por tonelada de soja, en el mercado cada vez son más las voces que advierten la necesidad de un "sinceramiento" de las expectativas de los vendedores, ante un valor actual que equivale a US$ 266 por tonelada. Más aún, si las condiciones se presentan favorables para la siembra y para la posterior evolución de la oleaginosa en Brasil (como se amplía por separado) y si los excesos de humedad en zonas agrícolas de la Argentina derivan hectáreas inicialmente previstas para el maíz hacia la soja.
La soja de la próxima cosecha se mantuvo estable ayer en 255 dólares por tonelada para la zona del Gran Rosario. En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones noviembre y mayo de la oleaginosa sumaron US$ 1,60 y 1,80, mientras que sus ajustes fueron de 271,30 y de 259 dólares por tonelada.
Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer alzas de US$ 3,31 y de 3,68 sobre los contratos noviembre y enero de la soja, cuyos ajustes resultaron de 364,50 y de 368,27 dólares por tonelada. Durante la rueda, los fondos de inversión especuladores adquirieron unos 13.000 contratos, equivalentes a casi 1,77 millones de toneladas de la oleaginosa.
El rumbo alcista del mercado, que llevó el valor de la soja al nivel más alto en dos meses, tuvo dos grandes fundamentos. En primer lugar, la avidez de la demanda externa por poroto de soja estadounidense. En su trabajo semanal sobre inspección de exportaciones, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) relevó un volumen de 2,74 millones de toneladas, por encima de los 2,51 millones del trabajo anterior y del rango previsto por el mercado, de 1,90 a 2,50 millones.
El segundo fundamento alcista fue el mercado de los aceites vegetales, que volvió a operar en alza por las nuevas y fuertes subas registradas en Malasia, referente global para el aceite de palma. Ocurre que por contingencias climáticas, la producción de ese aceite se prevé con importantes bajas y la normalización de la ofertas podría llevar más tiempo del previsto por la demanda. Como competido, ayer el aceite de soja trepó un 2,48% en la Bolsa de Chicago, al pasar de 774,26 a 793,44 dólares por tonelada.
La fortaleza del dólar frente al euro (la paridad entre ambas monedas pasó de 1,0880 a 1,0877) y el avance de la cosecha fueron dos de los factores que limitaron la tónica alcista de los precios de la soja.
Tras el cierre del mercado, ayer el USDA relevó el progreso de la cosecha de soja estadounidense sobre el 76% del área apta, frente al 62% de la semana pasada; al 84% de 2015 para la misma fecha, y al 76% promedio de las últimas cuatro campañas. El dato oficial resultó inferior al 77% promedio previsto por los operadores.
Maíz y trigo
Por maíz argentino disponible los exportadores ofrecieron ayer entre 2450 y 2470 pesos por tonelada para las terminales del Gran Rosario, sin cambios. En operaciones muy puntuales, algunos compradores llegaron a convalidar hasta 2500 pesos.
Para Bahía Blanca la oferta de la demanda también se mantuvo estable, en $ 2450 por tonelada, mientras que para Necochea la propuesta de $ 2350 implicó una quita de $ 50.
Negativo fue el saldo para el maíz de la próxima cosecha, dado que los interesados pagaron US$ 147 para el Gran Rosario y US$ 145 para Bahía Blanca, 3 y 5 dólares menos que el viernes pasado. En Necochea la merma fue de un dólar y el valor del cereal 2016/2017 resultó de 142 dólares.
En el Matba, la posición diciembre sumó un dólar y cerró con un ajuste de 167,50 dólares por tonelada, mientras que el contrato abril bajó un dólar y terminó la rueda con un precio de 149 dólares.
En Chicago el balance de la rueda fue negativo para el maíz, cuyas posiciones diciembre y marzo perdieron US$ 1,67 al terminar con ajustes de 137,10 y de 140,94 dólares por tonelada. En su informe sobre inspección de exportaciones, el USDA relevó apenas 541.500 toneladas de maíz, por debajo de las 875.808 toneladas del reporte anterior y del rango calculado por los operadores, de 900.000 a 1.100.000 toneladas.
Luego del cierre de los negocios, el USDA relevó ayer el avance de la cosecha estadounidense de maíz sobre el 61% del área apta, por encima del 60% previsto por el mercado.
Acerca del trigo, los exportadores pagaron $ 2250 por tonelada en Rosario y en Bahía Blanca, sin cambios. Los molinos ofrecieron entre 2000 y 3150 pesos por tonelada de trigo. El cereal nuevo osciló de 150 a 155 dólares por tonelada.