Entre las sorpresas del presupuesto 2017 figura la que muchos ruralistas temían. La anunciada rebaja de 5% adicional a las retenciones a la soja no aparece. Había sido una promesa de campaña del presidente Macri cuando eliminó, apenas asumido, todas las retenciones a los granos y se comprometió a ir podando 5% por año las de la soja. Sólo concretó la reducción del 35% al 30%. Pero el segundo escalón queda pendiente.
Para las entidades del campo hubiese sido otro empujón para aumentar el área sembrada y añadir tecnología al principal cultivo de la Argentina.
Sobre todo, después de que en la última campaña, cuando se apostó a una cosecha de 66 millones de toneladas de la oleaginosa, por culpa del clima se perdieron casi 7 millones.
Para esta campaña, que arranca con la siembra en octubre, se estima una cosecha de 54 a 55 millones de toneladas de soja.
Por cierto, la decisión cayó como dinamita en algunos sectores del PRO. Lo expresó ayer el siempre verborrágico Alfredo de Angeli, senador nacional por esa fuerza política. “Quiero que Mauricio cumpla con su palabra”, dijo. Otros dirigentes hace rato que se reconciliaron con la idea.
El proyecto que defiende estos días el Gobierno en Comisión no menciona ninguna rebaja de derechos a la exportación de los productos del complejo sojero. Sólo indica que se estima una recaudación por retenciones de 104.380 millones de pesos, una cifra 36,8% superior a la prevista para el año 2016.
Ese 5% , de acuerdo a la Bolsa de Rosario, equivale a US$ 1.000 millones. “Es el 0,6% del total de la recaudación”, cuantifica Rodolfo Rossi, presidente de Acsoja que cobija a toda la cadena del cultivo.
En Agroindustria aseguran que la rebaja estuvo a punto de concretarse, pero chocaron con la cruda realidad de las cuentas públicas, con un déficit que el ministro Prat Gay calcula en 4,5% en 2017 y que think tanks como Cippec estiman cerca de 7%.
“Cada ingreso cuenta”, dice el experto Ricardo Baccarin, quien asegura que los precios de la oleaginosa también anticipan que no habrá reducción de retenciones. La soja mayo, cuando la cosecha está en plena comercialización, se cotiza US$ 258 la tonelada, descontando una retención de 30% en vez del 25% que se esperaba.
El ministro de Agroindutria, Ricardo Buryaile, intentó que las entidades renunciaran por propia voluntad a esa rebaja. No obtuvo ningún apoyo. El martes se reúne la cadena de la soja, que dice velar por los intereses de los productores, con intención de reclamar que se concrete. Esta vez no exigirá una fecha.
De acuerdo a la especializada Valor Soja, el presupuesto asignado en 2017 para el Ministerio de Agroindustria ($16.784 millones) es apenas 2,8% superior al de 2016, lo que implica que se “licuará”en términos reales frente a una inflación proyectada en 17%.
Hoy la Sociedad Rural vuelve elegir para un excepcional tercer mandato a Luis Miguel Etchevehere como presidente de la entidad. La apuesta consensuada con las otras organizaciones es tratar de que en la discusión del presupuesto en el recinto del Congreso se imponga esa reducción de 5%.