El reporte periódico del USDA, conocido como WASDE, releva datos sobre existencias iniciales, importaciones, exportaciones, producción, consumo interno, existencias finales y otros más.
Originalmente, se dirigía a orientar al sector agroalimentario de EE.UU. Pero transcurridos los años, ha pasado a ser un informe referido a los commodities de todo el mundo.
Es cierto que los operadores y agentes económicos le confieren una elevada confiabilidad. De hecho, los reportes tienden a formar precios en base a las expectativas que ellos mismos generan.
Cada reporte se confecciona a partir de diversas fuentes de información, como las diferentes agencias del USDA. Se trata de más de 90 oficinas que suministran datos de casi 170 países.
Sin embargo, en los últimos tiempos, el organismo parece mostrar cierta debilidad en sus estimaciones.
Vamos a los hechos. Durante el período 2015/16, los operadores trabajaron sobre una posibilidad de un ratio (de stock/consumo en EE.UU.) cercano al 9%.
Pero, la semana pasada, el USDA terminó reconociendo que tan sólo era de poco menos de 5%. Y proyecta para el ciclo 16/17 un ratio del 9%.
Respecto a la producción de Sudamérica, para Argentina estima un volumen de 57 millones y para Brasil, de 101 millones de toneladas (ciclo 16/17).
Son números que no responden a una posibilidad concreta. La proyección se revela poco creíble.
Para la Argentina, la superficie disminuiría. Y respecto a Brasil, el aumento sería casi imperceptible. Los datos de los últimos años para la región, muestran una tasa de crecimiento en el área en baja.
En nuestro país, se descuenta un gran avance de la siembra en la nueva campaña. Está claro que el maíz desplazará parte de la superficie para soja. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires proyecta un aumento del 25%. A su vez, el INTA estima un incremento en la nueva campaña del 30% respecto del ciclo anterior.
Por el lado de la demanda, China sigue a todo vapor.
Es cierto que este país ha anunciado su propósito de aumentar el área de soja. Pero, no parece muy posible que lo logre. Actualmente produce algo así como 12 millones y necesita cerca de 100 millones de toneladas. ¿Cuánto puede aumentar en breve plazo?
El punto se patentiza si consideramos que, en poco tiempo, China va a necesitar 110 millones de toneladas por año.
Con la escala actual de precios, los márgenes de la industria se han contraído a niveles graves.
El FAS Teórico, de acuerdo al Ministerio de Agricultura, viene ubicándose entre $3600 y 3.900. La pérdida del sector de la molinería es patente. Sin embargo, las compras por parte de la industria no se han detenido.
¿Es posible que la industria prevea un aumento en el precio internacional?
Si la respuesta fuese afirmativa, resultaría lógica la actitud compradora de la industria.
En tanto, en los días recientes el mercado internacional renueva fuerzas. Hoy lunes, 19 de septiembre, la soja ajustó con subas, bajo la presión de compras técnicas. Por soja disponible, las fábricas domésticas ofrecieron $ 4.000.