Con una batería de reclamos, los productores frutihortícolas de distintas localidades de Río Negro expresarán hoy su crítica situación y regalarán unas 10 toneladas de peras y manzanas. Lo harán en la Plaza de Mayo, como modo de presión para poder ser recibidos por el presidente Mauricio Macri. La entrega de los 10.000 kilos de peras y manzanas, que llegaron en camión desde Río Negro, comenzará desde las 9:30 horas frente a la Casa Rosada, donde los productores entregarán un folleto para explicar la situación que atraviesa el sector. La convocatoria será encabezada por el presidente de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén, Jorge Figueroa y 19 presidentes de entidades representativas del complejo productivo, con acompañamiento de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Hacer visible el reclamo es una de las premisas de los productores, que pedirán una recomposición del precio que reciben por las frutas que producen, además de protestar contra la suba de costos logísticos y contra la apertura de importaciones de "miles de kilos de frutas" que denuncian están ingresando al país, desde Chile y Europa.
"Es una vergüenza que el consumidor esté pagando tan caro por las frutas cuando al productor le quedan migajas. Necesitamos decisiones políticas para el sector, y que nos puedan asegurar que la pera y la manzana tengan un precio como tiene toda la cadena. Estamos cobrando miseria al lado de lo que llega al consumidor", afirmó Sebastián Hernández, Presidente de la Cámara de Fruticultores de Allen (Río Negro), en declaraciones a Radio La Red, donde expresó que "el conflicto viene desde hace tiempo pero se profundizó en los últimos meses por el incremento de los costos de producción".
Según describió, los productores locales trabajan a pérdida, sin infraestructura para vender las frutas, algo que aprovechan las empresas comercializadoras que "condicionan y pagan lo que quieren por el producto", con hasta 12 meses de plazo.
Justamente las peras y manzanas figuran con las mayores distancias entre lo que recibe el productor y lo que se comercializa en góndola, en base a una canasta de 20 alimentos agrícolas que componen el índice IPOD (Índice de Precios en Origen y Destino), recientemente difundido por la CAME.
Allí, se especifica que las frutas y verduras con mayores brechas de importes en el mes de julio fueron la pera, con una diferencia de 11,1 veces, la mandarina (10,9 veces), el limón (10,8 veces), y la manzana roja (8,5 veces). "En la manzana, entre lo que cobra el productor y lo que paga el consumidor, hay un 851% de diferencia, y en la pera, 1009%", detalló Hernández. Según el informe de la CAME, el precio de origen por kilo de manzanas rojas fue en julio de $ 3, mientras que el precio destino promedio fue de $ 28,1 el kilo. En el caso de la pera, el productor recibió en promedio $ 2,1 y el kilo se vendió a $ 23,5. Según expresó a El Cronista Pablo Vernengo, director ejecutivo de Economías Regionales de la CAME, "se ve una mejora en general pero todavía no se resolvió el problema de los productores, que sufren una distorsión muy grande", afirmó y agregó que la participación del productor en el valor de góndola "continúa siendo baja".
En el caso de las peras y manzanas, la participación del productor en el precio de góndola fue cercano al 10%. Para el promedio de los alimentos agrícolas y ganaderos relevados en dicho informe, el agricultor sólo recibió el 27,9% del costo que pagó el consumidor, con un aumento de 2,7 puntos porcentuales frente al mes pasado.