El mercado estadounidense de soja se quedó ayer sin el fundamento que
posibilitó el repunte parcial de los precios en las ruedas precedentes: la
confirmación de nuevas ventas externas. En cambio, recibió nuevos pronósticos de
tiempo "amigable" para los cultivos que se encuentran definiendo su potencial de
rinde, que avalarían la percepción mayoritaria de los operadores, en cuanto a
que la cosecha 2016/2017 de la oleaginosa en los Estados Unidos será récord.
Con ese panorama, los inversores optaron por tomar ganancias y condujeron los
precios de la soja a la baja. Al cierre de los negocios en la Bolsa de Chicago,
las pizarras mostraron quitas de US$ 2,39 y de 2,11 sobre los contratos
septiembre y noviembre de la soja, cuyos ajustes resultaron de 366,89 y de
360,92 dólares por tonelada.
Según los reportes climáticos para las próximas dos semanas, tanto las
temperaturas como las lluvias oscilarán en niveles normales en el Medio Oeste de
los Estados Unidos. De cumplirse estas previsiones, tanto el maíz como la soja
habrán atravesado las etapas más críticas para la formación de sus rendimientos
bajo condiciones muy próximas al ideal.
Cabe recordar que mañana el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos
(USDA, por sus siglas en inglés) publicará su nuevo reporte mensual de oferta y
demanda de granos en el nivel mundial. El promedio de las estimaciones privadas
ubicó la cosecha estadounidense de soja en 107,26 millones de toneladas, con
rindes de 31,94 quintales por hectárea, por encima de los 105,60 millones y de
los 31,41 quintales previstos por el organismo en julio. Además, las existencias
finales 2016/2017 fueron proyectadas por los operadores en 8,60 millones, por
encima de los 7,90 millones del mes pasado.
En el mercado local también influyeron las bajas externas. Las fábricas ubicaron
sus ofertas en un rango de 4100 a 4150 pesos por tonelada para las terminales de
la zona del Gran Rosario, $ 50 menos que anteayer. Este descenso de los precios
se tradujo en un menor volumen de ventas, con operaciones que cayeron de las
90.000 toneladas del martes a cerca de 40.000 toneladas.
La misma caída de $ 50 se registró en Necochea, donde la oferta de los compradores pasó de 3900 a 3850 pesos por tonelada. En Bahía Blanca, la oleaginosa se mantuvo estable, en 3950 pesos por tonelada. Pese a la mayoría de bajas, todos los valores volvieron a quedar por encima del FAS teórico de la oleaginosa, que fue calculado en $ 3815 por el Ministerio de Agroindustria de la Nación.
Por soja de la próxima cosecha la demanda volvió a proponer entre 255 y 260 dólares por tonelada.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición noviembre de la soja bajó US$ 1,50 y cerró con un ajuste de 286 dólares por tonelada, en tanto que el contrato mayo sumó US$ 0,30 y terminó la jornada con un valor de 261,80 dólares.
Muy leves resultaron ayer las subas para los precios del maíz estadounidense, dado que las posiciones septiembre y diciembre subieron US$ 0,10 y 0,20 en la Bolsa de Chicago, donde los ajustes resultaron de 126,96 y de 131,10 dólares por tonelada.
El escenario para el maíz es muy similar al vigente para la soja en los Estados Unidos, dado que el mercado ya convive con la posibilidad muy cierta de que la cosecha resulte la más grande en la historia agrícola del principal productor global del cereal. En efecto, el promedio de las estimaciones privadas ubicaron el volumen de la campaña 2016/2017 en 374,84 millones de toneladas, contra los 369,33 millones calculados por el USDA en julio. Vale agregar que el rango de las proyecciones de los operadores va de 370,35 a 384,72 millones. En cuanto a las existencias finales, el mercado las prevé en 57,28 millones, por encima de los 52,85 millones del informe oficial anterior.
Sin cambios se negoció en maíz en el mercado físico local, dado que los exportadores ofrecieron de 2350 a 2400 pesos por tonelada para la zona del Gran Rosario y 2500 pesos para Bahía Blanca.
El maíz de la próxima cosecha, con entrega desde marzo, se negoció a US$ 143 para Rosario; a US$ 145 para Bahía Blanca, y a US$ 140 para Necochea, sin variantes.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) relevó ofertas de los consumos entre $ 2020 y 2450 por tonelada de maíz, según calidad, condición, procedencia y forma de pago.
En el Matba, en tanto, la tónica fue negativa para los precios del maíz. Las posiciones septiembre y abril perdieron US$ 1,30 y 0,10, en tanto que sus ajustes fueron de 162,70 y de 147 dólares por tonelada.
Acerca del trigo, las complicaciones climáticas que limitarían la oferta de cereal en la Unión Europea posibilitaron leves subas para el trigo estadounidense. El contrato septiembre en Chicago y en Kansas sumó US$ 1,75 y 0,64, mientras que su ajuste fue de 154,97 y de 151,29 dólares.
En la plaza local, los exportadores pagaron $ 2400 por tonelada de trigo condición cámara para la zona del Gran Rosario y $ 2350 para Bahía Blanca, sin cambios. El cereal de la nueva cosecha se negoció a US$ 155 en Bahía Blanca y en Necochea, y a US$ 150 en Rosario.
La BCBA indicó que los molinos pagaron entre 2350 y 4150 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.
Prevén una caída de comercio agrícola en Brasil
SAN PABLO (Reuters).- El mercado exportador de granos de Brasil se prepara para una virtual paralización de los negocios en los próximos meses, producto de la perdida de competitividad generada por la caída externa de los precios y por la apreciación del real frente al dólar.
Por esta razón, los operadores consideran que lo que resta comercializar de la cosecha pasada y las ventas anticipadas de la nueva campaña quedarán para fin de año. "Ya saqué pasajes para irme de vacaciones en septiembre", dijo un operador que pidió no ser identificado.
Según la consultora França Junior, las ventas anticipadas de soja 2016/17 están en el 20% del total esperado, 3 puntos arriba de julio, pero por debajo del 26% vigente un año atrás.