Antes de la fuerte irrupción de aire frío de origen polar que se afianzó en todo el país durante el fin de semana pasado, es posible que algunas lloviznas dispersas se hayan concretado en algunas localidades, pero esto ha sido una eventualidad que no suma nada a la escasez de precipitaciones dominante.
Lo más relevante ha sido el avance de aire frío que condiciona aun con mayor eficiencia el empobrecido patrón pluvial. Esta semana, luego que se moderó el frío algo de humedad ha ingresado y esto se ha evidenciado en las nieblas, neblinas y brumas que se reportaron hoy desde gran parte de la provincia. Este ambiente moderado no se sostendrá ya que en las próximas horas el viento del sur o del sudoeste nuevamente comenzará a imponerse para converger en un fin de semana frío. Principalmente con temperaturas mínimas bajas, las máximas frescas pero adecuadas a la época. La insolación completa el cuadro para definir un panorama de tiempo estable y que puede considerarse confortable si tenemos en cuenta que estamos a las puertas del invierno.
En cuanto al nivel de reservas, es lógico que las mismas se vayan resintiendo en forma progresiva. En este caso el retroceso es más evidente sobre el noroeste de ER y el centro norte de SF, pero este comportamiento progresará a otros sectores dado que no se perfilan precipitaciones en el corto plazo. Es decir las reservas regulares en superficie comenzarán a ganar terreno, pero esto por lo pronto no es un inconveniente grave para el avance de las siembras.
Siempre debemos considerar que puede haber un hándicap de humedad para los cultivos recientemente implantados, es decir, la exigencia mayor es para la pastura que ya viene con consumo previo. A esta altura parece paradojal que el mes de abril haya dejado niveles de lluvia extraordinarios y que hoy estemos hablando del retroceso de las reservas superficiales. Consideramos que si las sementeras han mantenido humedad como para que las siembras se concreten, a poco de superar la barrera de los 30 cm los plantines encontrarán agua para sostener sus próximos estadíos fenológicos.
El cambio de circulación ha sido muy marcado desde comienzos de junio. Esto ha permitido que la cosecha finalmente alcance un ritmo que va recortando los atrasos, fundamentalmente en el sur. En esta región el tiempo para los barbechos será mínimo y por lo tanto es posible que los trigos de ciclo intermedio y cortos sean los de mayor cobertura.
Si planteamos el recorrido de corto y mediano plazo, aún cuando parezca demasiado pronto, la evolución del mes de junio parece estar marcada claramente como para no lograr los niveles de lluvias esperados como normales. Esto obviamente será más evidente en zonas del este, donde habitualmente las lluvias del primer mes de invierno suelen ser más generosas. Con el paso que llevamos y las proyecciones sin lluvias de al menos una semana más, será difícil encontrar marcas en zonas del este que alcancen los 40 milímetros. Hacia el oeste de la región pampeana, con la mitad de este acumulado ya podríamos hablar de normalidad, pero salvo áreas del sudeste de CB, sur de SF, norte de BA, que ya han recibido agua en los primeros días del mes, muy probablemente tampoco se alcance este registro. En consecuencia hay que hacer buen manejo del agua superficial, previéndose un desarrollo favorable para aquellos trigales que logren un desarrollo radicular que les permita alcanzar rápido el agua mas profunda.
Por lo pronto, el tiempo frío y seco es el que marca la tendencia. Veremos si las últimas jornadas de junio o la transición hacia julio plantean algún beneficio hídrico.
- Por CCA - exclusivo Agrositio
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