La cosecha de soja de Argentina no se puede terminar de definir, y si bien la siembra de Estados Unidos avanza, resta todo un ciclo de producción.
Si bien el dato más alcista fue el de los stocks finales de la campaña 2016-17 de soja para USA, estimados en alrededor de 8 millones de toneladas. El mercado, a partir de ahí comenzó a intentar destruir la relación soja/maíz, vendiendo soja y comprando maíz. A raíz de esto llevamos una semana operando el posible cambio de siembra de soja a maíz, en zonas de Estados Unidos donde resta sembrar. Además a estos niveles de precios también se plantea la incógnita sobre el área destinada a soja en Sudamérica la próxima campaña.
Es importante destacar que en todo este tiempo, pasamos de un mercado bajista, a un mercado alcista sin gradualmente ser neutrales y pretendemos salir de este viaje ilesos. En un mes el precio de la harina de soja en Chicago subió 100 dólares, a niveles de mediados de 2014. La demanda continúa muy sólida y los márgenes de molienda son muy correctos.
Por su parte, entre enero y marzo de este año Brasil molió 9,2 mill de toneladas de soja lo que le permitió exportaciones por encima de los 4 millones de toneladas para ese período, justo por encima del año anterior. Esta situación de alta capacidad de producción de harina desde Sudamérica, continúa generando presión sobre las bases del Golfo, sin embargo el mercado no se da por aludido.
Pedíamos a gritos volatilidad, pero ahora sentimos que es demasiado. El mercado además de todo lo fundamental que tiene, que en realidad podría no ser tan grave, se encuentra inmerso en una coyuntura de macros desincronizados, petróleo subiendo, especuladores ingresando con fuerza y demanda que necesita preciar desde hace unas cuantas semanas, esperando que esta suba esto sea pasajera.
Estamos en una pausa en la que los precios se mueven fuertemente y donde no hay información contundente que nos puedan dar ideas más puntuales, estamos en los tiempos donde un cultivo está en proceso en USA, y una cosecha aún no se determina en Sudamérica, los analistas siguen moviendo sus impulsos y los especuladores aceleran la presión del corazón. El mercado no tiene sentimientos, mejor administra tus riesgos. Hay un mundo de oportunidades por capturar, no te olvides, administrar riesgos siempre será la clave.
Fuente: Agroeducación