EL CALAFATE.- Una chacra del empresario Lázaro Báez con dimensiones
descomunales para la zona fue la imagen más impactante en el último día de un
raid de allanamientos, cuyos resultados, por ahora, están más cerca de relevar
propiedades inmobiliarias que de encontrar tesoros escondidos bajo la meseta
patagónica.
Sin embargo, el fiscal federal Guillermo Marijuan trató de relativizar la falta de hallazgos contundentes y valoró todo lo que había visto en los procedimientos de esta semana.
"El operativo es sumamente exitoso. Hemos venido a tasar, conocer y valuar
determinados inmuebles y nos hemos encontrado con muchísimos más. Además, hemos
conocido algunos detalles que hacen a la obscenidad de esos inmuebles. También
hemos secuestrado automotores y algo de dinero", remarcó. También advirtió que
la ex presidenta Cristina Kirchner "es una de las personas sobre las que tiene
que dirigirse algún tipo de pesquisa" sobre presunto lavado de dinero, tras
recordar que está imputada en la misma causa por la que está detenido Báez.
En ese sentido, sostuvo que su investigación "no tiene techo" y que no va "a descartar la posible connivencia y participación de muchos otros imputados".
Ayer la sorpresa fue la chacra ubicada a la vera del Cañadón, sobre una profunda hondonada que oculta a simple vista su imponente estructura edilicia. El predio de 7,529 metros cuadrados conocido como fracción LXXXII-a fue adquirido por Báez y su esposa, Norma Calismonte, en 2008 y pagó por él 30 .000 pesos. Sobre él se construyó un edificio descomunal. El predio en el año 2009 se convirtió en un condominio en partes iguales entre los Báez y su apoderado local, Carlos Franchi, de acuerdo con documentos oficiales que cotejó LA NACION.
La enorme casona tiene dos plantas, grandes ventanales con balcón y está pintada de color amarillo chillón que destaca en la palidez de la meseta. En un edificio por separado se concentra un quincho y un espacio recreativo que suma una explanada asfaltada, una cancha multipropósito y una parquización abundante y bien cuidada. Todo rodeado que cortinas de álamos y pinos que disimulan el perímetro enrejado. El cuadro lo completa una casilla de seguridad en el ingreso, con personal de vigilancia.
Cerca de las tres de la tarde, Marijuan encabezó junto a personal de la Aduana, AFIP y Prefectura el operativo más extenso del día. En el lugar se requisaron distintos puntos en busca de dinero, documentación y pruebas que puedan aportar información a la causa por lavado y también se tasó la propiedad con expertos que llegaron a tal fin.
Entre los allanamientos establecidos en la ciudad se sumaron predios a nombre de la empresa Badial SA, la misteriosa constructora de Lázaro Báez que construyó poco, compró mucho y estuvo sospechada de lavado de dinero, centró sus actividades en esta ciudad, donde compró tierras y construyó un hotel que aunque terminado, nunca se inauguró. El hotel no fue allanado aún por Marijuan.
Badial fue la primera constructora de Báez, que en 2000 con Báez en la presidencia se amplió a diversas actividades: inmobiliaria, exportación e importación, turística, agropecuaria, gastronomía, entre otras. Desde entonces no paró de crecer. Con esa empresa adquirió más de 80 propiedades, la mayoría de ellas en El Calafate. Entre los predios allanados se encuentran la parcela 91-0719 y la cantera 91-0720 20 hectáreas ubicadas en el barrio Terrazas de Manantiales, donde Báez tiene el obrador de la empresa paralizada y una cantera. Otro predio a nombre de Badial que ayer se allanó fue a fracción LV, una extraña construcción sin terminar de varias hectáreas ubicada frente a la escuela 80 de esta ciudad.
En tanto que en Río Gallegos, otra equipo de peritos continuó el allanamiento en la sede de Austral Construcciones donde durante horas realizaron un inventario del parque automotor. Entre autos, camiones, camionetas pick ups, motoniveladoras, retroexcavadoras, camiones volcadores, mezcladoras de cemento, trailers y aplanadoras Báez supo tener mas de 900 unidades según los registros consultados por La Nacion en el año 2013. También en Río Gallegos se allanaron un galpón y un lavadero de autos.