ROMA.- Dinamarca volvió a alcanzar el primer puesto como país más feliz del mundo, según afirmó hoy el estudio World Happiness presentado en Roma.
La cuarta edición de este informe, realizado para Naciones Unidas por el Earth Institute de la Universidad de Columbia en Nueva York, clasifica a 156 países de acuerdo a la felicidad de sus ciudadanos y a su sensación subjetiva de bienestar.
Entre los países latinoamericanos la lista la encabezan Costa Rica (14°) y
Puerto Rico (15°), seguidos de Brasil (17°), México (21°), Chile (24°), Panamá
(25°), la Argentina (26°), Uruguay (29°), Colombia (31°), Guatemala (39°),
Venezuela (44°), El Salvador (46°) y Nicaragua (48°).
Los "top ten", detrás de Dinamarca, son: Suiza, Islandia, Noruega, Finlandia, Canadá, Holanda, Nueva Zelanda, Australia y Suecia. Estados Unidos, el país más rico del mundo, figura en el puesto 13°.
La desolada Siria, arrasada por un conflicto civil que ya dura 5 años; Afganistán, sumido en una lucha sin fin con los talibanes; Burundi, Togo y Benin ocupan los últimos cinco puestos. De las últimas 30 plazas, sólo cinco países no son africanos.
En los últimos años el tema de la "felicidad" de la población comenzó a ser una cuestión de interés político para los gobiernos. En Bután, Ecuador, Escocia, los Emiratos Árabes y Venezuela se crearon ministerios en el gobierno para ocuparse de la felicidad de sus ciudadanos.
Jeffrey Sachs, de la Universidad de Columbia y uno de los autores del informe, señaló que la felicidad y el bienestar deberían estar entre los objetivos de todos los países.
"El bienestar humano debería alimentarse a través de una estrategia holística que combine objetivos económicos, sociales y medioambientales, indicó en un comunicado antes de la presentación oficial del informe en Roma.
Un país especial
Dinamarca, con 5,6 millones de habitantes, ha liderado la lista dos veces
desde que el organismo internacional empezó a medir la felicidad en todo el
mundo en 2012. El estudio valora factores como la salud de la gente y su acceso
a atención sanitaria, las relaciones familiares, la seguridad laboral y factores
sociales como la libertad política y el grado de corrupción en el gobierno.
La igualitaria Dinamarca, donde las mujeres ocupan el 43% de los cargos de
responsabilidad en el sector público, es conocida por su amplio y generoso
sistema de bienestar, que cubre a los ciudadanos durante toda su vida.
Pocos se quejan de los altos impuestos, ya que a cambio reciben un sistema sanitario donde todo el mundo tiene acceso gratuito a medicina general y hospitales. Los impuestos también pagan escuelas y universidades, y los estudiantes reciben subvenciones mensuales durante un máximo de siete años.
Muchos están tranquilos porque si pierden su empleo o se enferman, el Estado los mantendrá.