A casi un mes de la eliminación de las retenciones y el fin de las trabas
para comerciar al exterior y pese a que por razones de calidad aún los
productores reciben valores por debajo de los precios de mercado, el trigo
argentino volvió al mundo.
Desde el 22 de diciembre pasado hasta ayer, cuando se bajaron las
retenciones, se registraron casi 885.000 toneladas del en el sistema de
Declaración Jurada de Ventas al Exterior (DJVE), entre la campaña 2014/15 y la
actual. Al precio FOB oficial promedio para lo que va de enero (u$ 192 la
tonelada), el volumen comprometido a embarcar representa u$s 170,7 millones.
Del total declarado, unas 200.000 corresponden a la campaña "vieja", que se
había acumulado ante la falta de autorización por parte del gobierno de Cristina
Fernández de Kirchner, que en los últimos ocho años daba cupos a cuentagotas
para exportar el cereal, y también el maíz.
De acuerdo con información oficial, hasta fin de enero, hay buques cargando o
anunciados para algo más de 466.600 toneladas de trigo. Entre ellos, figura a la
carga las 120.000 toneladas de cereal que la Argentina logró venderle al mayor
importador mundial del grano, al ganar una licitación pública tras más de 3
años, que El Cronista informó en su edición del 24 de diciembre pasado.
En el cronograma de embarques también están, sobre el puerto de Bahía Blanca,
20.000 toneladas de trigo que compró Corea del Sur, un país que hace una década
no adquiría el cereal argentino. A eso se suma el negocio que se conoció ayer,
por el cual la Argentina le exportará a ese país 55.000 toneladas del cereal
para forraje, que llegarán a destino entre mediados de marzo y mediados de
abril, a u$s 180 la tonelada.
Entre los países que recibirán trigo argentino, de distinta calidad, en las
próximas semanas aparece un atípico comprador: Estados Unidos. La ciudad de
Wilmington, en Carolina del Norte, adquirió 13.000 toneladas de trigo argentino,
dado que es más barato que el norteamericano, y espera que el carguero llegue a
destino antes de mediados de febrero. Para el próximo martes, en tanto, está
previsto que cargue otro buque con trigo y con el mismo destino, esta vez por
algo más de 26.000 toneladas. Ese volumen más que duplica al trigo local que
llegó a EE.UU. entre junio y noviembre pasados, según destacó la agencia
Bloomberg.
Además, hay buques cargando o anunciados hasta fin de mes, para trigo con
destino a China; Vietnam; Tailandia; Indonesia; Marruecos y Chile. Brasil, por
su parte, que en 2015 fue el mercado por excelencia del cereal local, con 85,3%
de las compras, mantiene su liderazgo: hasta fin de mes, 145.000 toneladas serán
embarcadas con destino al principal socio del Mercosur.
De acuerdo con los analistas, la renovada demanda externa puede mejorar los precios a los productores, que desde hace tiempo se quejan porque todavía sufren descuentos entre los valores FAS teórico (capacidad de pago de los compradores) y lo ofertado por exportadores e industrias. El FAS teórico del trigo pan es de $ 2322 la tonelada, según publicó el Ministerio de Agroindustria. Ayer, por el cereal disponible, calidad cámara, se pagó $ 1850 para la semana próxima y $ 1950 para febrero/marzo.