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Quince minutos antes de que se anunciara su nombre como ministro de Agricultura, el presidente electo Mauricio Macri lo llamó y le dijo: "Quiero que seas mi ministro, confío en vos". Luego le pidió cuatro cosas: "trabajo en equipo, humildad, unir a los productores y no tocar ni permitir que se lleven un peso". Ricardo Buryaile, productor, diputado radical por Formosa y ex vicepresidente segundo de CRA, es el hombre elegido para manejar Agricultura. En una carrera contra otros candidatos para ese cargo como Ricardo Negri (h), Néstor Roulet y Luis Miguel Etchevehere, el nuevo presidente lo eligió por su perfil político que supo moldear con su experiencia en el Congreso. En una entrevista con LA NACION, Buryaile contó sus planes inmediatos desde la cartera agrícola.

-¿Cómo tiene pensado armar el equipo que lo acompañará en Agricultura, su estructura y prioridades?

-Hay una fundación (Pensar) que estuvo trabajando en esto, armando los equipos y yo voy a ser quien va a encabezar ese equipo técnico. Quien va a coordinar ese equipo técnico es Ricardo Negri. Vamos a definir cuáles son las necesidades, definiendo la estructura. En el INTA hay que volver hacer extensión a la gente, a los productores, volver hacer un INTA profesional que trabaje técnicamente y deje la politización. Lo quiero colaborando con la producción. Y quiero un Senasa abocado a la sanidad vegetal y animal.

-¿Va a buscar recuperar las facultades de sanción que tenía Agricultura y pasaron al Ministerio de Economía?

-Quiero que el Ministerio vuelva a tener las facultades y potestades que tenía de mandar sobre el sector agropecuario, tanto en lo que tiene que ver con la regulación, la sanción y todo lo relacionado con el comercio. Hasta ahora lo que han hecho es vaciar al Ministerio dotando de atribuciones a Comercio.

-¿Las economías regionales son una de las papas calientes que enfrentará? ¿Tiene algo pensado al respecto?

-Si uno mira esa camiseta de Boca que es la Argentina con el mapa electoral (amarillo en el centro, donde ganó Macri, y celeste en el Norte y Sur, donde triunfó Scioli), la realidad que tienen las franjas de arriba y de abajo son las producciones regionales. Mendoza está dentro de la franja amarilla pero tiene serios problemas con la vitivinicultura, hay una súper producción y una caída de la exportación. Si se va más al Norte, en el NOA hay problemas con la caña de azúcar que habrá que ver cómo hacemos para llevar del 10 al 20% la mezcla en los combustibles. Si vamos al algodón, está casi desapareciendo en la producción norteña. En Misiones y Corrientes está el problema de la yerba mate y el té. Y cuando se va al sur hay serios problemas con las peras y las manzanas. En la lechería hay un tema muy serio donde desaparecieron 6000 productores y seguimos con los mismos niveles de producción de hace seis años, con una caída de precios internacionales. Entonces, ¿cuál es mi idea? Hay una Argentina inmediata que puede recibir respuestas inmediatas que es esa franja central.

-¿Cuáles serían esas respuestas inmediatas?

-Las respuestas inmediatas, en esa franja central, las planteó Mauricio Macri. Eliminación de las retenciones al trigo y el maíz y seguramente habrá alguna corrección del tipo de cambio. Lo que va a pasar es que van a subir los ingresos, porque si se corrigen el tipo de cambio y bajan las retenciones se va a tener más nivel de ingresos. Además, Mauricio Macri prometió una rebaja de las retenciones de la soja del 5%. Y hay que buscar competitividad en las zonas más alejadas y eso se logra por un lado con precios, pero con infraestructura y medidas complementarias. Dentro de esas medidas complementarias está la compensación de fletes que propuso Macri. Vamos a ver cómo recuperar competitividad producción por producción.

-¿Cómo va a llevar adelante la relación con las entidades del campo?

-Voy a hablar con todas las entidades, con Príncipe, Egidio (Mailland, de Coninagro), Etchevehere y Chiesa. Si hay una cosa que es clara, es que soy un representante del Gobierno ante los productores más allá de mi condición de productor. Vengo a defender los intereses colectivos en una área específica que es Agricultura y donde los productores vienen a defender sus intereses sectoriales. Esa es la inteligencia que tenemos que tener, anteponer los intereses del bien común general al del bien sectorial, pero esto no puede significar roces. Estoy convencido que al campo de aquí en más sólo le quedan buenas noticias.

-¿Cree que van haber tensiones entre las necesidades del Gobierno de bajar la inflación y al mismo tiempo favorecer las exportaciones del agro?

-Todos sabemos que existen y existirán tensiones en un principio. Lo que también es cierto es que los precios no tienen un correlato directo con el precio al productor. Mucho ha quedado en la cadena de intermediación. Obviamente van existir tensiones pero debemos producir más y si producimos más y no afectamos el nivel de los salarios seguramente no vamos a tener problemas. Esas tensiones se superan aumentando la oferta.

-¿La informalidad en la industria frigorífica, porcina e industria láctea va a estar en la agenda?

-Sí, tenemos que tender a una economía más formal porque la informalidad hace que la competencia sea desleal. Hay que trabajar con una ley federal de carnes que efectivamente se cumpla y hay que ver cómo tener en determinadas regiones mataderos con un cumplimiento impositivo y normas bromatológicas. Vamos a combatir tanto la informalidad laboral como en la comercialización. Eso nos va a dar transparencia y va a dar a los eslabones las mismas posibilidades de competir.

Trayectoria gremial y política

Profesión: Contador

Edad: 52

Buryaile tuvo una destacada participación en la actividad gremial en Confederaciones Rurales de Chaco y Formosa (Chafor). Dos veces fue presidente de esta entidad. Además, se desempeñó como vicepresidente segundo de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y presidente de la Sociedad Rural de Pilcomayo

El conflicto entre el campo y el Gobierno de 2008 le dio visibilidad más allá del sector. Radical, en 2009 llegó al Congreso como diputado por Formosa. En la Cámara baja fue presidente de la Comisión de Agricultura