Los efectos de El Niño, la corriente que calienta las aguas del Pacífico, comenzaron a sentirse en la Argentina. El aumento en la cantidad y la intensidad en las precipitaciones, especialmente en el Nordeste y en el área central del país, es una muestra. Sin embargo, el pico máximo de fenómeno se produciría el mes próximo, estiman en el Servicio Meteorológico Nacional.
"Según los modelos climáticos, se espera que la máxima intensidad del
fenómeno se produzca durante diciembre. Así lo informó ayer la Organización
Meteorológica Mundial (OMM), que indicó que durante el trimestre noviembre,
diciembre y enero se notarán los efectos del calentamiento de esta corriente
oceánica", indicó José Luis Stella, del servicio de Climatología del SMN.
Entre las consecuencias, también se espera que nuestro verano sea menos caluroso y más lluvioso. Incluso los pronosticadores indican que, como se trata de un Niño fuerte, pueda tener lo que se denomina "rebote" y los efectos se prolonguen hasta el otoño de 2016.
"Observamos un Niño entre los tres más fuertes de los que se tenga registro.
Se espera que en algunas zonas los veranos puedan ser más fríos. Por la mayor
entrada de perturbaciones en la atmósfera y precipitaciones, el calentamiento
por radiación se amortigua. En buena parte del centro del país, no se espera un
verano caluroso", agregó el experto.
El Niño se origina de manera cíclica por la variación de las corrientes de agua y aire cerca del Ecuador y sobre el Pacífico. Los vientos no llevan el aire húmedo hacia Australia y el sudeste asiático, como es habitual, sino hacia el Este, en dirección a la costa occidental americana. Al mismo tiempo, se desplaza agua fría desde la región polar sur.
Las estimaciones de la OMM apuntan a que en lo que queda del año la
temperatura de la superficie del agua en las zonas central y oriental del
Pacífico tropical superará la temperatura normal en 2ºC, por lo que el actual
episodio de El Niño "se situará entre los tres más fuertes registrados desde
1950 (1972/1973, 1982/1983 y 1997/1998)".
"Que las temperaturas de la superficie del océano estén por encima de la media tiene un impacto en la circulación de la atmósfera; en la región sudeste de América del Sur, por ejemplo, se observarán mayores precipitaciones durante lo que resta de la primavera y el verano", indicaron en el SMN.
En la Argentina, las precipitaciones superarán la media en la región de la Mesopotamia, que abarca las provincias de Misiones, Corrientes y Entre Ríos; en el nordeste de la Patagonia, y en el centro del país.
Por otra parte, el SMN pronostica que "en las regiones central y norte de la Patagonia las temperaturas serán levemente inferiores a las normales en los próximos tres meses y en el nordeste argentino serán superiores a las normales, lo que se debe a la falta de lluvia y a los cielos despejados".
Según la OMM, las condiciones meteorológicas a nivel global se han alterado debido al cambio climático, que tiene entre sus consecuencias una "tendencia general hacia el aumento de la temperatura oceánica, pérdida de hielo marino en el Ártico y merma de más de un millón de kilómetros cuadrados de nieve en el hemisferio norte".
En tanto, en la conferencia de la OMM realizada en Nueva York se dieron a conocer los pronósticos para este año: "Este Niño es el más fuerte desde hace más de 15 años -dijo el director general, Michel Jarraud-. Las zonas tropicales y subtropicales están viviendo ya graves períodos de sequías e inundaciones destructivas que llevan el sello de El Niño. Las temperaturas medias globales han marcado nuevos valores récord y El Niño las aviva aún más".
Cambio climático
Las emisiones de gases de efecto invernadero que generan el calentamiento global también pueden afectar la aparición de este tipo de fenómenos.
"Lo que se espera es que el aumento en las temperaturas del mar provoque una mayor recurrencia del fenómenos de El Niño. Desde 1998 hasta el año pasado, hubo un período prolongado en que el Pacífico se mantuvo más frío, razón por la cual se generaron más corrientes La Niña, que en nuestro país provocaron sequías. Hay que ver si este Niño es un fenómeno aislado", indicó Pablo Canziani, investigador de la UCA y el Conicet, especialista en cambio climático.
"Lo que sabemos es que la combinación del aumento de la emisión de gases de efecto invernadero y el agujero en la capa de ozono ha causado que la pampa húmeda y el sur de Brasil sean las zonas del mundo dónde se registra el mayor aumento de precipitaciones desde 1980", agregó.
Hasta el momento, el fenómeno de El Niño más fuerte en la Argentina provocó grandes inundaciones en la zona del Litoral y alcanzó a sectores de la provincia de Buenos Aires. En total, aquel fenómeno afectó a nueve provincias y los anegamientos dejaron un saldo de 17 muertos y 120.000 evacuados.
Homenaje a Canziani
La Academia de Ciencias del Ambiente homenajeará al investigador y experto argentino en cambio climático Osvaldo Canziani, fallecido hace dos semanas. Canziani, junto con otros 3000 expertos, formaba parte del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC) que ganó el premio Nobel en 2007. En la misma sesión, los académicos Alieto Guadagni, Leónidas Girardin y Raúl Estrada Oyuela expondrán sobre la Conferencia del Clima que se realizará en París desde el 29 de este mes.
LA NACION, integrante de Climate Publisher Network