La estabilidad en la condición de los cultivos estadounidenses y la posibilidad de que los rindes se ubiquen entre los más elevados de las últimas campañas generaron ayer el descenso de los precios de la soja en la Bolsa de Chicago, donde los inversores se desprendieron de contratos a la espera de las nuevas cifras mensuales de oferta y demanda de grano, que el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) publicará mañana.
Las pizarras del mercado externo mostraron quitas de US$ 2,94 y de 2,57 sobre los contratos septiembre y noviembre de la soja, cuyos ajustes resultaron de 324,36 y de 320,50 dólares por tonelada. Los fondos de inversión especuladores liquidaron unos 6000 contratos, equivalentes a poco más de 800.000 toneladas.
Para los operadores resultó decepcionante el informe semanal sobre la condición de los cultivos publicado por el USDA anteayer, tras el cierre de los negocios. Mientras el mercado "apostaba" por una caída de la proporción de plantas en estado bueno/excelente, el organismo la sostuvo en el 63 por ciento.
Así, el reporte semanal del USDA; el relevamiento de la agencia Reuters, que ubicó la previsión de la cosecha de soja de los Estados Unidos en 105,30 millones de toneladas, y la proyección de un volumen próximo a los 100 millones para el nuevo ciclo agrícola de Brasil, pusieron otra vez en foco una realidad adversa para los precios: la campaña 2015/2016 será la cuarta consecutiva en que la oferta global superará la demanda.
Ahora, la expectativa del mercado pasa exclusivamente por las cifras que
mañana publicará el USDA en medio de la rueda de negocios. De confirmar los
106,59 millones de toneladas calculados para la cosecha de los Estados Unidos,
los precios tendrán un margen acotado para subir, sobre todo si no se disipa
pronto la incertidumbre sobre el rumbo de la economía de China, de quien se
esperan compras por 79 millones de toneladas de la oleaginosa durante el año
comercial 2015/2016.
El mercado físico doméstico no convalidó las bajas externas, dado que los compradores volvieron a pagar 2100 pesos por tonelada de soja con entrega inmediata sobre las terminales de la zona del Gran Rosario y sobre los puertos de Bahía Blanca y de Necochea.
Como en las ruedas previas, el valor propuesto por la demanda quedó por encima del FAS teórico fijado por el Ministerio de Agricultura de la Nación, que ayer fue de $ 1970 por tonelada y que para la rueda de hoy fue calculado en 1965 pesos.
En línea con las bajas externas, en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) las posiciones noviembre y mayo de la soja retrocedieron US$ 0,80 y 0,10, en tanto que sus ajustes fueron de 234,80 y de 210,80 dólares por tonelada.
Maíz y trigo
Por tercera rueda consecutiva, los precios del maíz cerraron ayer con saldo positivo en la Bolsa de Chicago. En efecto, los contratos septiembre y diciembre del cereal sumaron US$ 0,59 y 0,30, mientras que sus ajustes resultaron de 140,35 y de 145,27 dólares por tonelada. Compras de oportunidad de los fondos de inversión y de los comerciales (exportadores e industrias) posibilitaron las leves subas del grano grueso. Estas, no obstante, estuvieron limitadas por el inicio de las labores de cosecha en zonas puntuales de los Estados Unidos.
En el mercado local, el maíz se negoció con mayoría de subas, pero lejos de las expectativas de los vendedores. Para los puertos de Bahía Blanca y de Necochea los exportadores ofrecieron 900 y 870 pesos por tonelada del cereal, 30 y 10 pesos más que anteayer. En la zona del Gran Rosario, los compradores propusieron $ 920 por grano con entrega durante el mes próximo, $ 10 más que en la rueda anterior. Sobre esta última región, hubo interesados en negocios con descargas diferidas a noviembre y diciembre, por los que pagaron entre 100 y 102 dólares.
Ayer, Agricultura ubicó la capacidad de pago de los exportadores en $ 1018 por tonelada de maíz, mientras que para hoy, el FAS teórico fue calculado en 1026 pesos.
En el Matba, las posiciones diciembre y abril del maíz retrocedieron ayer US$ 0,50 y 2,40, mientras que sus ajustes fueron de 107 y de 116,60 dólares por tonelada.
Acerca del trigo, el contrato diciembre en Chicago y en Kansas perdió US$ 1,01 y 1,65, en tanto que su ajuste resultó de 173,52 y de 173,62 dólares por tonelada, respectivamente. La abundante oferta global y la fuerte competencia que registran las exportaciones estadounidenses volvieron a ser los principales factores bajistas para el grano fino de los Estados Unidos.
En el mercado doméstico, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los molinos pagaron entre 1450 y 1700 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago. Para Rosario, los exportadores ofrecieron $ 1350 por el cereal de calidad (ph 78 y un mínimo de 10,5% de proteína) y $ 1030/1050 por grano condición cámara. En Bahía Blanca el trigo de calidad se mantuvo en 154 dólares.