Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) denuncia una vez más la lamentable situación que vive la lechería en la Argentina, que se agudiza por estas horas con los conflictos generados por el gremio ATILRA y las medidas que ha implementado.
La lechería nacional desde hace 11 años se encuentra estancada en su producción y desde hace largo tiempo encuentra graves problemas de rentabilidad, lo que ha significado una dramática caída en el número de tambos.
CRA lamenta el intento de baja del precio que recibe el productor, que pretende disminuir de $3,10 a $2,80 el litro en tranquera de tambo, situación que no se tolera cuando todos los costos crecen en disparada inflacionaria, tema que por su importancia ha sido generadora del conflicto.
El accionar de ATILRA, en conjunto con productores sin representación gremial de ninguna entidad, con la pasiva actitud de la Subsecretaria de Lechería de la Nación no hace más que profundizar la crisis que atraviesa el sector, impactando no solo a los tamberos sino también a la industria láctea y al consumido.
La pésima política implementada por el Gobierno muestra con claridad lo que se ha logrado, resultando inconcebible que se desperdicie leche cruda por la imposibilidad de su procesamiento en tiempo y forma.
CRA ha sostenido que estas políticas aplicadas llevarían a estos problemas. Ahora se intentan reuniones urgentes, conformación de entidades afines y todo tipo de atajos para no enfrentar seriamente la ausencia de políticas públicas para la lechería.
CRA insta a normalizar esta situación de forma urgente y solicita una vez más a las autoridades nacionales que concreten políticas que solucionen la crisis de la lechería, con la representación gremial legítima de los productores y que no adhiera a ninguna medida de bloqueo de plantas fomentadas por ATILRA.