Finalizando el viernes y cambiando para el sábado se observó un aumento en las coberturas nubosas, las cuales se mantendrían en forma alternada hasta la jornada del lunes. El tiempo inestable se tradujo en una oferta de agua modesta, de gran cobertura. La nubosidad nunca logró un desarrollo capaz de generar precipitaciones de mayor porte. Aquella baja probabilidad de que se concretaran lluvias más importantes sobre el este, no se concretó. La excepción a este comportamiento se observó en el sur sudeste de BA donde las lluvias fueron algo más generosas

En el mapa que resume las precipitaciones acumuladas a lo largo de la primera quincena del mes de mayo, puede apreciarse que en la mayor parte de la región pampeana han predominado registros muy modestos, apareciendo en el este la ya mencionada suma más generosa que fortalece las reservas de la principal zona triguera. Por otra parte, las lluvias modestas en las zonas mediterráneas no pueden considerarse inusuales para la época, menos cuando transitamos el mes en que habitualmente se produce el mínimo pluvial.

Lo más destacado del mapa se concentra en la provincia de Misiones donde las lluvias de la primera quincena ya han superado los 200 milímetros, con picos que casi duplican esta marca en el norte de la provincia (superan largamente la escala del mapa). Estas importantes precipitaciones han decantado en forma marginal al norte de Corrientes, para luego presentarse un rápido gradiente hacia las lluvias modestas que se han venido observando en la región pampeana. Las extraordinarias lluvias de Misiones, forman parte de un área mucho más vasta que incluye toda la zona del pantanal brasileño y gran parte de la franja agrícola del este de Paraguay, donde se complican las tareas de cosecha de maíz de segunda y el trigo florece complicado por los excesos.

Parece bastante claro que el fenómeno de El Niño comienza a mostrar su influencia positiva sobre el patrón pluvial, ajustándose a las zonas donde en esta época del año suele tener este impacto. Al mismo tiempo este comportamiento es una evidencia de lo que puede suceder con las precipitaciones en la región pampeana, principalmente sobre el este, a medida que nos adentremos en la primavera.

Las reservas de humedad se mantienen favorables en las zonas que presentan mayor grado de actividad agrícola, principalmente las zonas trigueras, tanto la tributaria de Rosario como las del sudeste de BA. En este sentido, las perspectivas para el desarrollo de la fina son buenas en cuanto a la disponibilidad de humedad, pero insistimos que un invierno tan moderado no es lo esperado como óptimo para el desarrollo de los cultivos.

El enfriamiento que llegó tras el pasaje frontal llegó a su apogeo en la jornada de ayer, donde el despliegue de heladas fue generalizado. El amanecer de hoy, también frío, ya evidencia el cambio de circulación y la vuelta a un ambiente más templado.

Como ya se viene observando desde la última parte del otoño, la circulación del noreste con transporte de aire templado y húmedo, está resultando más persistente que la normal para la época. Es decir las irrupciones de aire frío no se sostienen y esto impacta sobre el comportamiento térmico, el cual fortalece el tránsito de un invierno moderado, con enfriamientos pero sin que puedan establecerse condiciones rigurosas.

Se espera que finalizando el domingo las lluvias desciendan desde el centro de la Mesopotamia al norte de ER, con posibilidades de incluir la franja este de esta provincia pero sin avanzar sobre el resto de la región pampeana.

  • Por CCA - exclusivo Agrositio
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