El reclamo tambero se extiende a medida que empeora la situación de los productores, que sufren la suba de sus costos, muchos de ellos dolarizados, al tiempo que las empresas lácteas, con excepción de algunas pocas, como SanCor, amenazan con recortar el precio que pagarán por las entregas de junio, además de extender los plazos de pago.
En este contexto, se presentó esta semana en sociedad la flamante Asociación de Productores de Leche de Argentina (APLA), conformada por productores de Santa Fe, Córdoba y Santiago del Estero pertenecientes a las distintas entidades rurales, pero disconformes con los magros resultados obtenidos, según entienden, de la lucha conjunta.
La entidad creada a fines de marzo celebró esta semana una reunión que convocó a más de 700.000 tamberos, según dijo el dirigente Daniel Oggero, proveniente de la Federación Agraria, de la que también participó la Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina, Atilra, el gremio de los trabajadores de la industria. Del encuentro surgió un petitorio a las empresas nucleadas en el Centro de la Industria Láctea (CIL) y Apymel, que reúne a pymes del sector, para que reciban a las entidades.
Según confirmó Oggero a este diario, "se les dará a las empresas un tiempo prudencial para contestar", hasta el lunes, y de no ser recibidos, los productores y sus ahora aliados del gremio de la industria volverán a reunirse "ya para definir medidas de fuerza", indicó el referente del sector tambero.
La amenaza incluye protestas frente a las empresas, que podrían inclusive impedir, como se hizo en otras oportunidades, la entrada y salida de camiones, complicando el abastecimiento.
El plan de protesta fue lanzado en momentos en que crece la conflictividad en el sector agropecuario en general. Ya por su lado, tres entidades gremiales (Sociedad Rural, Coninagro y Confederaciones Rurales) lanzaron una jornada nacional de de protesta para el próximo 17 de julio, mientras la Federación Agraria Argentina (FAA) realizará asambleas en todo el país del 18 al 25 de este mes para definir los pasos de su propio plan de lucha.
Los productores tamberos cobraron por cada litro de leche entregado en mayo entre $ 3,10 y $3,20 y sus principales compradoras, como Saputo, Williner y Corlasa, amenazan con recortar un 4% ó 5% ese precio. Mastellone no confirmó qué hará con los pagos mientras que SanCor, por su parte, fue la única que confirmó que no bajará sus precios.
Los productores, por su parte, coinciden en reclamar un valor no menor a los $ 4,50 por litro de leche entregado a la industria, para hacer frente a sus costos, en medio de un proceso de liquidación de tambos.