En cuestión de horas, la ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Nemesia Achacollo, tomó un vuelo sorpresivo desde La Paz hasta Santa Cruz, se sentó a negociar con el titular de la Federación de Ganaderos de Santa Cruz (Fegasacruz), Fernando Menacho, y selló una alianza para garantizar la provisión de carne en todo el país.
El objetivo, según Achacollo y Menacho, es neutralizar la amenaza de paro nacional convocado por la dirigencia de los carniceros en rechazo a la facturación exigida por el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) y evitar que cunda el temor por una inexistente escasez.
La explicación de Achacollo apunta a que se potenciará la venta de carne, con
factura, que hace la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) a los
vendedores minoristas y a los supermercados.
Desde la anterior semana ya se lo hace en La Paz evitando la escasez con la
entrega de 60 reses por día a los comerciantes.
Ayer, en Cochabamba se hizo lo propio con la provisión de 100 kilos a cada
carnicero, con lo que se desactivó casi en su totalidad el paro.
Achacollo fue clara al afirmar que el acuerdo con el sector ganadero asegura el
suministro de forma indefinida y en los volúmenes que sean necesarios.
Otro factor que se activará es la venta directa de carne en las ferias de peso y precio justo. Hoy arrancan en la ciudad de La Paz, el viernes en El Alto y luego seguirá en Cochabamba.
La autoridad remarcó que los intermediarios mayoristas tendrán que facturar
sí o sí y que el Ejecutivo no tiene nada que negociar con ellos.
También aclaró que el amago de paro se registra solo en La Paz y en Cochabamba.
Oferta asegurada
Para Menacho, se desinfló la pretensión de los dirigentes carniceros de buscar ‘echar la carga’ del no pago impositivo al sector ganadero y de querer hacer un problema nacional del desabastecimiento de carne.
Actualmente, a decir de Menacho, por las buenas condiciones climáticas que se han registrado hasta la fecha, hay alta oferta de ganado bovino para faenar y abastecer la demanda nacional sin problemas.
Otro aspecto que subrayó el directivo es que el precio de la carne para los consumidores finales no tiene por qué subir.
Según el gerente general de Fegasacruz, Javier Landívar, la demanda nacional es de 211.000 toneladas anuales. La producción de carne es de 230.000. Es decir, hay un excedente de 19.000 toneladas.
Carniceros protestan
El ejecutivo de la Confederación nacional de Trabajadores en Carne de Bolivia (Contracabol), Pedro Yujra, lamentó que el Gobierno quiera hacerles ‘guerra’ con la comercialización de carne.
“Los comercializadores de pollo de Cochabamba, de El Alto y de La Paz se movilizarán”, advirtió.
Ayer, los afiliados al Sindicato de Carniceros de Santa Cruz (Sicarcruz) hicieron una marcha de protesta. No obstante los carniceros de la Asociación de Comerciantes de Carne al Detalle (Adeca), que son la mayoría en Santa Cruz, confirmaron que venderán con normalidad, sin ningún incremento.