Los precios del maíz y del trigo sumaron ayer la tercera rueda consecutiva con saldo negativo en la Bolsa de Chicago, segmento en el que perdieron un 4,25 y un 6,56 por ciento de su valor, respectivamente. Entre los principales fundamentos del movimiento descendente se destacaron el clima favorable para la siembra y para la evolución de los cultivos y la firmeza del dólar frente al euro, que les resta competitividad a las materias primas exportables de los Estados Unidos.
Para el maíz, las pizarras del mercado estadounidenses mostraron ayer quitas de US$ 2,17 y de 2,46 sobre los contratos julio y septiembre, cuyos ajustes resultaron de 137,59 y de 140,05 dólares por tonelada. Estas posiciones perdieron un 4,25 y un 4,24% respecto de los valores vigentes tras el cierre del jueves pasado, de 143,69 y de 146,25 dólares.
En las últimas tres jornadas de negocios, los fondos de inversión especuladores se desprendieron de 25.000 contratos de maíz, equivalentes a 3.175.000 toneladas del cereal.
Anteayer, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) relevó el avance de la siembra de maíz 2015/2016 sobre el 92% del área apta, por encima del 85% vigente un año atrás. Además, en su primera valoración sobre la condición de los cultivos, el organismo reveló que el 74% de las plantas se encuentra en estado bueno/excelente, un nivel muy próximo al 76% reportado por el organismo el 1º de junio de 2014, cuando hizo su evaluación inicial de los cultivos que luego darían lugar a la cosecha récord de 361,09 millones de toneladas.
Si bien aún es muy temprano para hablar del potencial de rinde del maíz estadounidense, los operadores comenzaron a mirar con desconfianza los 104,69 quintales por hectárea considerados por el USDA para el nuevo ciclo agrícola, que dejaría una producción de 346,22 millones. La campaña 2014/2015 terminó con un rendimiento promedio nacional récord, de 107,33 quintales.
En las últimas semanas, lluvias regulares contribuyeron a mejorar el estado de los suelos en las áreas del Medio Oeste (zona núcleo para la producción de granos gruesos) afectadas por el déficit hídrico. Hoy aún están con altas demandas de humedad los estados de Minnesota y de Wisconsin, mientras que el resto evidencia buenas condiciones para el desarrollo de los cultivos. Y según los últimos reportes meteorológicos, durante los próximos seis a diez días se prevén buenas lluvias para la región.
Ayer, la consultora estadounidense FC Stone advirtió que la ocurrencia del fenómeno climático de El Niño podría acentuar la caída de los precios del maíz y de la soja al permitir grandes cosechas en los Estados Unidos, en Brasil y en la Argentina. "El fenómeno disminuye los riesgos de secas prolongadas durante los meses de junio y julio, con volúmenes de lluvias adecuados para el desenvolvimiento de la cosecha", dijo la firma.
En cuanto al trigo, la posición julio en la Bolsa de Chicago bajó ayer US$ 2,11 y cerró con un valor de 179,22 dólares por tonelada. En las últimas tres ruedas, este contrato perdió un 6,56% de su valor frente a los 191,80 dólares vigentes tras el cierre del jueves anterior. En este segmento negativo, los fondos de inversión liquidaron 21.000 contratos, equivalentes a poco más de 2,85 millones de toneladas.
Mayor aún fue la caída del precio del trigo en la Bolsa de Kansas, donde el contrato julio bajó ayer US$ 4,59 al cerrar con un valor de 188,13 dólares por tonelada. Las tres últimas ruedas negativas depreciaron el valor del cereal un 8,20% respecto de los 204,94 dólares vigentes el jueves pasado.
Mientras el mercado especuló durante buena parte de la semana pasada con eventuales pérdidas de rindes y de calidad en las variedades del trigo de invierno, producto de las copiosas lluvias registradas en la zona de las Grandes Planicies, el USDA elevó anteayer del 44 al 45% la proporción de cultivos en estado bueno/excelente, un nivel que quedó muy por encima del 30% vigente un año atrás.
En cuanto al mercado de las monedas, ayer la relación dólar/euro pasó de 1,0870 a 1,0893, pero pocas jornadas atrás la paridad era de 1,1442. La fuerte apreciación de la divisa estadounidense resulta un escollo más para el trigo de los Estados Unidos en el mercado exportador, donde debe competir con los países de la ex Unión Soviética y de la Unión Europea, entre otros.
Acerca de la soja, los precios cerraron con ligeras subas en Chicago, luego de cinco ruedas bajistas consecutivas. En efecto, las posiciones julio y noviembre sumaron US$ 1,66 y 0,64, mientras que sus ajustes fueron de 340,62 y de 333,08 dólares. Sin fundamentos alcistas en el horizonte, el repunte fue un movimiento técnico tras las fuertes pérdidas precedentes.
Respecto del mercado doméstico, la actividad volvió a ser casi nula en la zona del Gran Rosario, donde siguen las negociaciones salariales entre los trabajadores de la industria aceitera, las empresas y el Ministerio de Trabajo de la Nación (como se amplía en la página 20). La Bolsa de Comercio de Rosario indicó que los exportadores ofrecieron entre 1850 y 1880 pesos por tonelada de soja y de 950 a 980 pesos por tonelada de maíz.
En el Mercado a Término de Buenos Aires, la posición enero del trigo bajó US$ 3 y cerró con un valor de 135 dólares por tonelada.
Soja: finaliza la cosecha en el norte de Santa Fe
La Bolsa de Comercio de Santa Fe informó ayer que la cosecha de soja de segunda en el centro-norte de la provincia avanzó sobre el 90% del área apta, lo que representa unas 525.000 hectáreas, con un progreso semanal de 23 puntos. En el detalle de los resultados zonales, la entidad indicó que en los departamentos San Martín, San Jerónimo, en el sur de Castellanos y en sur de Las Colonias la recolección terminó con rindes promedio de 35 a 38 quintales por hectárea.
La entidad agregó que en el centro de Castellanos, en los departamentos Las Colonias y La Capital y en el sur de San Justo se obtuvieron de 28 a 30 quintales y que aún resta cosechar el 10% del área. Además, en el norte de Castellanos, el norte de Las Colonias, el centro y el sur de San Cristóbal, el centro y el norte de San Justo, el sudeste de Vera y en el sudeste de General Obligado se han obtenido entre 15 y 28 quintales, con el 85% de la superficie levantada.