La devaluación del real en Brasil, que desde septiembre pasado se depreció 30%, les está pegando de lleno a varios productos de las economías regionales que se exportan hacia ese mercado.
Brasil es un comprador clave en decenas de productos, la mayor parte regionales. Según un informe del Instituto de Estudios Económicos y Negociaciones Internacionales de la Sociedad Rural Argentina (SRA), en el promedio de los últimos cuatro años ese país se llevó el 35% de las ventas externas de peras y manzanas, el 43% de las de arroz, el 34% del pescado, el 28% del poroto alubia, el 7% de los vinos, el 69% de las aceitunas de mesa, el 84% de las papas congeladas, el 18% de la leche y el 73% de las cebollas y ajos. "La devaluación del real se sentirá con más énfasis en las diferentes actividades económicas de las provincias", señala el informe, que destaca que este factor agrava una situación complicada por la inflación, la suba de costos en dólares y la presión fiscal, entre otros puntos.
En rigor, varios de esos productos ya sufrieron el cimbronazo. Según datos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), en el primer bimestre de 2015 las ventas de manzanas hacia Brasil cayeron 81% (1731 toneladas) respecto de igual período de 2014, y las de peras retrocedieron 12% (22.249 toneladas). Para agravar la situación, a fines de marzo pasado Brasil suspendió las importaciones de estos productos de la Argentina tras detectar la plaga carpocapsa en mercadería que llegó a su territorio.
En el caso del arroz, en el primer bimestre del año las exportaciones a Brasil disminuyeron 74% (6330 toneladas). "Venimos perdiendo competitividad porque los costos suben por el ascensor, mientras el tipo de cambio lo hace por la escalera. Esta devaluación impacta negativamente", expresó Claudio Francou, presidente de la Federación de Cooperativas Arroceras Argentinas (Fecoar). Con una fuerte política de competitividad, Paraguay ya logró desplazar al arroz argentino del mercado brasileño.
En pescados, en el primer bimestre del año las ventas al principal socio del Mercosur cayeron 15% (5793 toneladas). En tanto, las exportaciones de arvejas lo hicieron 5% (4012 toneladas).
La industria lechera también tiene dificultades para entrar en ese mercado. En el primer bimestre del año, colocó 11% menos de leche en polvo (4571 toneladas) y bajó 43% (2367 toneladas) la venta de otros lácteos, básicamente sueros. "Brasil compra menos por la devaluación y porque hay menos capacidad de consumo", dijo Miguel Paulón, presidente del Centro de la Industria Lechera (CIL).
De acuerdo con el grado de industrialización de los productos, las economías regionales tributan de 5 a 10% por retenciones a la exportación. Para el presidente de la Rural, Luis Miguel Etchevehere, ante la pérdida de competitividad se deben eliminar. "Hay que sacar ya mismo las retenciones para todas las actividades agropecuarias y para todos los productores. Ya no tienen ningún sentido con la pérdida de competitividad que están viviendo todas las producciones", subrayó.
Según un trabajo del productor Néstor Roulet, las retenciones inciden cada vez menos en la recaudación total del Gobierno. De hecho, pasaron de representar un 11,6% del total recaudado en 2003 a un 6,6% el año pasado. Para este año se prevé un porcentaje aun menor, un 4,3%, con $ 72.994.607.384. "Esta baja participación nos permitiría sacar las retenciones a esos sectores, que mediante la posibilidad de un mayor flujo productivo compensarían con otros aportes esta quita tributaria", evaluó Roulet.
En 2014, las retenciones de las economías regionales más los derechos que pagan la carne, el girasol, el trigo y el maíz, entre otros productos, apenas significaron 1,38% del total recaudado, con $ 17.883 millones.
SECTORES EN JAQUE
Peras y manzanas
En el primer bimestre del año las ventas a Brasil del primer producto bajaron 12% y las del segundo, 81%, versus igual período de 2014
Lácteos
Brasil compró en los primeros dos meses 11% menos de leche en polvo
Arroz
Las exportaciones retrocedieron 74%.