Sólo este año, la depreciación del real alcanzó el 21% contra el dólar.

Si bien uno de los motivos centrales por los cuales la Argentina cayó al decimoprimer puesto como exportador mundial fue el cepo a las ventas externas, que opera desde 2006 y se mantiene hasta ahora para abastecer el mercado interno, el aumento local del precio de la carne, en especial desde 2009, y dos años después ,el inicio del cepo al dólar que creó una brecha entre el oficial y el paralelo, inhibieron las ventas externas.

En 2014, la Argentina sólo exportó el 10% del volumen que envió al exterior el principal socio del Mercosur. Y desde ese momento su competitividad siguió deteriorándose: si se toman los valores del novillo de exportación en reales, se ve que tocaron en noviembre su techo de 15 años. Desde ese momento al actual, en moneda local, cayeron sólo 1%, es decir que lograron mantenerse en un nivel muy alto, explicó el especialista Miguel Gorelik, director del portal Valor Carne. Sin embargo, de noviembre a esta parte, la devaluación le permitió a Brasil pasar de un novillo de u$s 3,80 por kilo a uno de u$s 3 por kilo en la actualidad, ganando un 20% de competitividad.

En ese lapso, el precio del novillo argentino tuvo una tendencia alcista, pero en términos de competitividad, el país transitó el camino inverso al de Brasil.
Es que a la baja de los precios en dólares del vecino país se sumaron también Uruguay y Paraguay, países que superaron a la Argentina en sus exportaciones en los últimos años y en los que también una pérdida de valor de la moneda local ayudó a sumar competitividad.

Si se toma el valor del novillo, es decir, el costo de la industria para hacerse de un animal de exportación, para el promedio de los tres competidores del Mercosur, actualmente el novillo argentino vale 33% más en dólares. Hace sólo 50 días, esa diferencia era mucho menor y alcanzaba el 13%, según calculó Gorelik.

La baja del precio en dólares le viene a la industria brasileña como anillo al dedo en momentos en que algunos de sus principales compradores, como Rusia, Irán y Venezuela, también sufrieron la pérdida de valor de su moneda, de la mano de la baja de los precios del petróleo. Inclusive Europa, el destino de los cortes de calidad, también sufrió la depreciación de su moneda.

La Cámara de la Industria de la Carne (Ciccra) analizó ayer en un informe la pérdida de competitividad del sector y criticó la decisión oficial de mantener los niveles de tipo de cambio.

Al respecto, sostuvo que "la única diferencia entre la política de Martínez de Hoz y la de Kicillof pareciera estar en la forma de financiar al país". En el primer caso, se favoreció el ingreso de capitales vía "endeudamiento público y privado, lo que provocó que el tipo de cambio (fijo) se atrasara", mientras en la actualidad "el déficit fiscal se financia con emisión monetaria", que genera inflación, mientras se "administra la depreciación del peso para evitar una nueva corrida cambiaria".