Fundando en que el precio del petróleo sigue registrando disminuciones, desde la Defensoría del Pueblo de la Provincia se planteó tanto a la secretaria de Energía como a la subsecretaria de Combustible, como también a la OFHEPI (Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos), se gestione “una nueva disminución en el precio de las naftas y del gas-oíl que se sume al 5% que ya se está aplicando”, según publicó el diario de Formosa.

El Ombudsman Provincial, José Leonardo Gialluca, consideró a esta alternativa como posible y conveniente para todas las economías regionales y además la nacional, desde la óptica en la cual una nueva decisión política de estas características de “disponer otra baja en el precio de los combustibles, permitirá un mayor consumo y repercutirá indirectamente de manera favorable, también en el precio de los bienes y servicios para provincias como la nuestra, alejada geográficamente de los grandes centros de producción y en las que el -valor flete- incide siempre negativamente en el bolsillo de los trabajadores”.

Por otro lado, se fundamentó la solicitud en que el Gobierno Nacional ya ha implementado bajas y eliminaciones de impuestos para el sector industrial petrolero y todas estas medidas que realmente son históricas, deberían también beneficiar a los consumidores finales.

Se señaló además, que “el argumento de que si se bajan los precios de los combustibles estaría vinculado a una acción negativa para mayores inversiones en “Vaca Muerta” es absolutamente falso, puesto que existen infinidad de gestiones y acciones para que ello no se produzca, y lo lógico económicamente hablando es que se busquen otros caminos para una mayor producción de gas, petróleo y reservas; sin dejar de autorizar e implementar otra rápida reducción en el valor de los combustibles”.

Se explicó que “en la pirámide del consumo nacional, su base está compuesta principalmente por los trabajadores y los consumidores finales, en donde la simple ecuación de la baja del precio del crudo, debe necesariamente trasladarse a las estaciones de servicio con combustibles más barato, pues entendemos Institucionalmente que se debe ayudar económicamente a las industrias, a los refinadores, y también al sector más débil de toda esta relación comercial que, somos los consumidores argentinos, quien tenemos los derechos económicos de poder gozar de nuevos beneficios”.