Por segunda rueda consecutiva, los precios del maíz cerraron en baja ayer en la Bolsa de Chicago y quedaron en el nivel más bajo de las últimas cinco semanas. En esta ocasión, el principal fundamento negativo para las cotizaciones del cereal fue el incremento de las existencias de etanol en los Estados Unidos, una consecuencia más de la crisis que atraviesa el valor del petróleo.

Las pizarras del mercado estadounidense mostraron bajas de US$ 1,87 y de 1,97 sobre los contratos marzo y mayo de la soja, cuyos ajustes resultaron de 149,99 y de 152,94 dólares por tonelada. Durante la rueda, los fondos de inversión especuladores liquidaron unos 9000 contratos, equivalentes a poco más de 1,14 millones de toneladas.

Ayer, en su trabajo semanal, la Administración de Información de Energía de los Estados Unidos comunicó que las existencias de etanol sumaron 1,38 millones de barriles y que quedaron en 20,23 millones de barriles. El incremento semanal de las reservas, de 7,32%, quedó por encima de la expectativa de los operadores y resultó el mayor desde 2010, cuando el organismo comenzó a relevar estos datos. Además de la influencia bajista sobre el maíz, este reporte generó la caída de las cotizaciones del etanol, que quedaron en el nivel más bajo desde junio de 2005.

La prolongada tendencia bajista del valor del petróleo -ayer logró repuntar de 45,89 a 48,48 dólares por barril- y la incertidumbre sobre su futuro inmediato tienen consecuencias directas sobre el mercado agrícola, dado el creciente uso de maíz para la elaboración de etanol y, en menor medida, el uso de soja para la producción de biodiésel.

En el caso particular del etanol, el lunes pasado, en su informe mensual de oferta y demanda de granos, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) elevó de 130,82 a 131,45 millones de toneladas el volumen de maíz destinado a la producción del agrocombustible, sobre una cosecha estadounidense total de 361,09 millones.

Pese al incremento de la industrialización de maíz estimado por el USDA, buena parte de los operadores teme que la fragilidad del valor del petróleo lleve a terreno negativo los márgenes de la producción de etanol y que ello le quite estímulo a la actividad y, por ende, eleve las ya abundantes existencias del grano grueso tras la cosecha récord.

No contribuye con la necesidad de achicar el stock de maíz estadounidense la firmeza del dólar frente a monedas como el euro, dado que ello encarece las materias primas de los Estados Unidos y complica su comercialización fronteras afuera.

En el mercado doméstico, al igual que anteayer la necesidad puntual de un exportador posibilitó la mejora del valor del cereal disponible para General Lagos, de 980 a 1000 pesos por tonelada. Para Arroyo Seco, el grano grueso se mantuvo estable, en 950 pesos.

La tónica bajista externa volvió a golpear sobre los precios del maíz argentino 2014/2015, que pasó de 133 a 130 dólares para Bahía Blanca y de 125 a 120 dólares para San Martín.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones abril y julio del maíz perdieron US$ 1 y 0,50, mientras que sus ajustes coincidieron en 128 dólares.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los consumos pagaron ayer de 960 a 1200 pesos por tonelada, según calidad, condición, procedencia y forma de pago.

Respecto de la soja, luego de operar durante buena parte de la rueda con signo negativo, compras de oportunidad de los fondos de inversión y de los comerciales (procesadoras y exportadores) le posibilitaron un cierre con mayoría de subas en la Bolsa de Chicago. En efecto, los contratos marzo y mayo sumaron US$ 1,93 y 1,66, en tanto que sus ajustes resultaron de 370,84 y de 373,77 dólares por tonelada.

En el nivel local, la propuesta de las fábricas se mantuvo en $ 2400 por tonelada disponible para las terminales de la zona de Rosario, sin cambios. No ocurrió lo mismo con la mercadería de la próxima cosecha, que, según la Bolsa de Comercio de Rosario, bajó de 240 a 235 dólares para San Martín. El volumen de ventas de soja nueva fue muy reducido, dado que para los vendedores el piso está en los 250 dólares por tonelada.

La posición enero de la soja en el Matba se mantuvo estable, con un ajuste de US$ 286,50, en tanto que el contrato mayo subió US$ 0,20 y cerró con un valor de 241,20 dólares.

Con el dólar firme como espada de Damocles, el trigo estadounidense sumó ayer la sexta rueda consecutiva con saldo negativo. La posición marzo del cereal en Chicago y en Kansas perdió US$ 3,77 y 2,48, mientras que su ajuste fue de 197,59 y de 211,28 dólares, respectivamente.

En la plaza doméstica, los molinos ofrecieron entre 950 y 1400 pesos por tonelada de trigo. En Bahía Blanca, la exportación volvió a pagar $ 1250 por cereal con ph 78 y un mínimo de 10,5% de proteína.

LA BCR PREVÉ MÁS MAÍZ Y TRIGO, PERO MENOS SOJA

La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) elevó ayer de 21,50 a 22,40 millones de toneladas su proyección sobre la cosecha de maíz 2014/15, a partir de un rinde nacional estimado en 73,5 quintales por hectárea, por encima del promedio de las últimas cinco campañas, de 68 quintales. La entidad advirtió que enero es un mes clave para el desarrollo del cultivo y que las condiciones medioambientales imperantes "pueden determinar ajustes sobre las cifras de rinde y, consecuentemente, de producción".

Acerca del trigo, la BCR incrementó su previsión de cosecha en 100.000 toneladas, de 12 a 12,1 millones de toneladas. Esta mejora respondió al ajuste alcista de los rindes estimados para Córdoba, Santa Fe y para La Pampa, que elevaron el promedio nacional de 28,2 a 28,5 quintales por hectárea.

En cuanto a la soja, la entidad redujo de 20,7 a 20,6 millones de hectáreas la superficie cubierta y de 55 a 54,50 millones de toneladas su estimación sobre la cosecha.